Elon Musk: de querer hacer videojuegos a ser dueño de Twitter

Elon Musk, el sudafricano nacionalizado canadiense y también estadounidense que acaba de hacerse dueño de Twitter, es probablemente una de las figuras más excéntricas en toda la industria de la tecnología. El magnate es el centro de atención nuevamente; sin embargo, muy poco se sabe de su relación que ha tenido con los videojuegos.

Elon Musk, un niño de 12 años que soñaba con los videojuegos

Para muchos es sabido que Musk se convirtió en multimillonario a la corta edad de 27 años, cuando logró por fin cofundar una de sus primeras compañías exitosas, PayPal, en medio de la burbuja dotcom. Aun así, ya para entonces, el camino del emprendedor había sido muy largo y variado.

A inicios de los años noventa, Elon Musk trabajaba para una compañía ubicada en Palo Alto, California, desde donde ya se había mudado tiempo atrás. Ya para entonces, demostró su talento para la programación aplicada a videojuegos con un programa bastante adelantado a su época.

Este programa se llamaba Ancient Times (probablemente por su gusto por los dinosaurios) y no era nada menos que un multitasker, un programa multitarea que permitía leer la información de un CD al mismo tiempo que se ejecutaba un juego. Vale recordar que era inicios de los 90 y tanto la tecnología del disco compacto como el multimedia apenas estaban en pañales en la computación.

La compañía para la cual trabajaba Musk en Palo Alto era Rocket Science (coincidentemente similar a sus proyectos futuros con SpaceX). Años después, Musk cofundaría la empresa Zip2 (1995) y luego X.com (1999), la que luego se llamaría PayPal. Ambas lo hicieron multimillonario en 1998.

Pasos primerizos en programación por el gaming

Es indudable que el buen devenir de Musk partió de su talento como programador y visionario; sin embargo, probablemente nada de esto hubiera sucedido si no fuera por su acercamiento a la programación desde muy chico.

Apenas con 12 años, Musk fue uno de los niños afortunados que recibió como regalo una Commodore 64, computadora doméstica más que popular por aquel entonces. Logró dominar por completo el lenguaje BASIC de esa máquina y crear su propio videojuego en poco tiempo.

El título se llamó Blastar y no tiene nada que ver con el juego del mismo nombre que apareció en arcades en 1983 y en Amiga en 1993. Aun así, como ya te lo imaginas, era de naves y algo similar a Space Invaders, pero con un ritmo más lento.

Blastar fue vendido por 500 dólares a la revista sudafricana PC and Office Technology, cuando Elon Musk seguía teniendo 12 años. ¿En qué invirtió el dinero? En otra computadora, cómics y el juego de rol Dungeons and Dragons. Todo un visionario.