La trágica historia de Claire Miller, la menor de 14 años que asesinó a su hermana mayor en EE.UU.
Claire Miller, de solo 14 años, mató a su hermana mayor, Helen, quien vivía con parálisis cerebral. El crimen conmocionó a todo Estados Unidos y destapó el abandono terapéutico de la salud mental por parte de las autoridades.
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En la ciudad de Manheim, Pensilvania, Estados Unidos, los inviernos suelen ser silenciosos, casi inmóviles. La noche del 21 de febrero de 2021 no fue la excepción. La familia Miller (Mark, Marie, Helen y Claire) cenó como de costumbre y se despidió hasta el día siguiente. Pero unas horas después, el hogar quedaría destruido para siempre.
Claire, de 14 años, no pudo dormir. Según dijo luego, las voces en su cabeza no la dejaban en paz. A la 1:00 a.m., desactivó la alarma de la casa, entró en el dormitorio de Helen (su hermana mayor, de 19 años, con parálisis cerebral) y la apuñaló siete veces, mientras le tapaba la cara con una almohada. Minutos después, llamó al 911 y confesó lo que había hecho.

Claire Miller es fanática del TikTok y ahí subía contenido sobre sus intereses y pensamientos. Foto: TikTok/Infobae
Los rastros que Claire Miller dejó en redes sociales
Claire parecía ser una adolescente más. Buena alumna, querida en la escuela, con un gusto marcado por el animé y fanática de TikTok, donde compartía videos bailando o bromeando con su padre. Pero en paralelo, su mundo interno comenzaba a fracturarse. Sufría alucinaciones, se autolesionaba y luchaba con su identidad de género. A los 13 años, le confesó a su padre que creía ser un varón. También había comenzado a escribir mensajes cada vez más oscuros a sus amistades.
“Traté de matar a mi pez anoche”, le escribió una vez a una amiga. “Captain America es una víctima. No sé cuánto tiempo más podré detenerme…”. En otros mensajes decía sentir ganas de herir a la gente, y que solo su computadora lograba distraerla de los pensamientos más violentos. Su obsesión con el cine de terror crecía, especialmente con Halloween (1978), la historia de un joven que asesina a su hermana. “Yo fui la Michael Myers de mi hermana”, diría tras el crimen.
Las alucinaciones y la infancia de Claire Miller
La historia de Claire es también la historia de una familia exigida por el cuidado de una hija con discapacidad severa. Helen, quien utilizaba una silla de ruedas y requería asistencia permanente, era amorosa, artística, y había ganado premios por sus pinturas. Claire creció siendo la “hermana sana”, y aunque la quería y ayudaba con dedicación, también arrastraba una culpa silenciosa y una creciente incomodidad: le molestaba cómo reaccionaban sus amigas ante la presencia de Helen. “Nunca se va a enamorar. Nunca tendrá hijos. Mis amigos están incómodos con ella”, escribió.
Durante el juicio, su psiquiatra reveló que Claire convivía con voces en su cabeza. Una femenina, cruel y autodestructiva. Otra masculina, amable. Ambas peleaban entre sí. También se diagnosticó psicosis activa, ansiedad y disforia de género. Pero la terapia familiar se detuvo con la pandemia, y su progresivo deterioro pasó inadvertido.
La justicia en el caso y el dolor de la familia Miller
El juez David Workman decidió que Claire debía ser juzgada como adulta. Para la fiscalía, ella sabía perfectamente lo que hacía: eligió a su hermana porque no podía defenderse. “Helen murió en manos de alguien a quien amaba”, dijo la fiscal Amy Muller. “Es imposible saber si cualquier ser humano que esté con Claire corre o no peligro”.
Claire espera el juicio en un centro juvenil. Tiene ahora 16 años y enfrenta una posible condena de 25 años. Sus padres, muy acongojados, batallan por no perderla también. “No quisiera perder a mis dos hijas”, dijo su padre. “Yo sé que Claire no quiso hacerlo”, repitió su madre conmovida.























