Conoce a Jesús, el niño que usa una pierna ortopédica y sueña con ser un árbitro de fútbol
Tiene 10 años pero ya lleva bastante tiempo preparándose para ser un juez de línea profesional y participar en importantes partidos como de los Juegos Paralímpicos.
Desde muy pequeño, Jesús ha encontrado su motivación para seguir adelante. Él nació sin su pierna derecha, pero esto no fue impedimento para lograr sus sueños. Con su padre como inspiración principal, cada decisión que ha tomado le permitió convertirse, a su corta edad de 10 años, en árbitro de línea en los partidos de fútbol de una liga de menores en Colombia. Sin duda, su historia de superación continuará despertando emociones. Conoce aquí cómo empezó todo.
El fútbol es un deporte que inspira a miles de personas en todo el mundo. Una figura importante en los diversos partidos es el árbitro, la autoridad que hace cumplir las reglas de un juego. Esa fue una de las razones por las que Jesús Adrián González practica siempre para mejorar su desempeño en los partidos que están bajo de su supervisión los fines de semana en la Liga del Atlántico.
Jesús Gonzáles inició su debut como árbitro en la liga local de Barranquilla. Foto: captura de Facebook / Clubes de Fútbol del Atlántico
Su padre, Elkin González, un árbitro experimentado, contó, para una entrevista en El Heraldo, que su trabajo cautivó a su hijo, por lo que este no dudó en seguir sus pasos. A los 8 años comenzó a realizar pinitos en partidos de fútbol y un año después ya formaba parte del grupo arbitral. El menor hizo su debut en el Estadio Moderno vigilando un partido de la liga local.
Un niño colombiano logrando sus sueños
“Decidí arbitrar porque es una pasión linda y hermosa”, confesó Jesús para El Heraldo. Su pierna ortopédica no fue un obstáculo para conseguir su objetivo de ser imparcial en el terreno del juego. Por el contrario, ha fortalecido su espíritu para conseguir sus propósitos: “Mi mayor sueño es ser cuarto árbitro del fútbol profesional colombiano e impartir justicia en unos Juegos Paralímpicos”, contó.
Él es un emprendedor, así lo reconoce su progenitor, quien ha visto todos sus esfuerzos por destacar en sus clases para prepararse como árbitro. Ningún dolor se manifestaba cuando ponía en práctica todo su aprendizaje, ni las clases tácticas que recibía afectaban su esfuerzo físico. Era claro que Jesús daría todo de sí para no defraudarse. Por ello, en corto tiempo ya estaba arbitrando en una cancha de fútbol.
Cada uno de sus movimientos fue seguido por profesionales y admirado por los cientos de asistentes a los partidos. Jorge Acosta, presidente de la Asociación de Árbitros de Fútbol del Atlántico, fue uno de los dirigentes que expresó su admiración por el menor. “Él nos deja a todos una enseñanza, que las limitaciones son mentales mas no físicas. Nos invita a todos a seguir adelante”, comentó para El Heraldo.
La historia de este pequeño fue conocida a partir de una publicación en Twitter, donde @Rafamedinac grabó el preciso momento en que Jesús Gonzáles hacía gala de su labor de juez de línea. A los pocos minutos, la publicación se volvió viral y miles de cibernautas comentaban su respeto hacia su labor como árbitro.
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Profesor de historia motiva a sus alumnos como si fuese un director técnico de fútbol
Varios profesores han conquistado las redes sociales con sus innovadoras formas de dar clases, desde bailar trends de TikTok hasta cantar cumbia para animar a los que desaprobaron, todo ello con la intención de que sus alumnos tengan la mejor experiencia en el centro de estudio. Recientemente, un docente de historia consiguió llevarse cientos de felicitaciones de parte de los internautas tras haber dado un breve discurso como si fuese un director técnico de fútbol.
Miles de usuarios catalogaron como el “mejor maestro” a Juan Carlos Doncel, un profesor de bachillerato en España que se dedica a dar clases de historia de una manera bastante peculiar, pero que —a su vez— consigue agradar a su alumnado. Cabe destacar que el bachillerato es la enseñanza postobligatoria tras haber completado la educación secundaria.