Las letras de duelo. Premio Cervantes mexicano, miembro del boom latinoamericano, murió ayer a los 83 años de edad a raíz de una hemorragia en el esófago. Iba a publicar Federico en su balcón.,Murió Carlos Fuentes, se ha ido un grande, México. EFE/ El escritor mexicano Carlos Fuentes, una de las principales plumas del boom latinoamericano, murió ayer en la capital de su país, a los 83 años, y deja un gran hueco en las letras hispanas que será difícil de llenar. El autor de obras como La muerte de Artemio Cruz (1962), Gringo Viejo (1985) o Terra Nostra (1975) pereció a las 12:15 hora local (17:15 GMT) en un hospital del sur de la capital mexicana, donde había sido ingresado de urgencia. Desde su casa editorial, Alfaguara, dijeron a Efe que el escritor comenzó a sentirse mal ayer en la mañana en su residencia, ubicada en el barrio de San Jerónimo, en el sur de la capital, y fue trasladado al hospital donde se le pudo estabilizar, pero murió después. En el hospital, su médico, Arturo Ballesteros, dijo que su muerte se debió a una “hemorragia del tubo digestivo que le provocó la pérdida del estado de conciencia”. Se despertó hacia las 5:00 hora local (10:00 GMT), incluso se bañó y tomó algunos líquidos, pero ya sentía algún malestar y por eso llamaron al médico. Terminó por desmayarse en su domicilio, agregó Ballesteros. “Cuando llegué presentaba insuficiencia respiratoria, su esposa Silvia Lemus y yo llegamos al hospital a las 10:45 (15:45 GMT)”, añadió en declaraciones a los periodistas Ballesteros, que lo atendía desde hace diez años. El médico añadió que nunca había presentado problemas en el aparato digestivo y el único padecimiento que tenía era en el corazón, desde 1997, pero se encontraba bien de salud. Las fuentes de Alfaguara insistieron en que no había sentido molestias en los últimos días, e incluso “se echó un viaje de más de un mes a Estados Unidos, a Brasil, a la Feria del Libro de Buenos Aires y a Chile” hace poco. El novelista tenía previsto ofrecer en los próximos días algunas entrevistas con motivo de la próxima publicación de una novela titulada Federico en su balcón. Los restos del escritor serán velados mañana de cuerpo presente en un homenaje que se le rendirá en el Palacio de Bellas Artes de esta capital, según informó el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta). En México, el presidente Felipe Calderón calificó a Fuentes como un “escritor y mexicano universal”, mientras que la secretaria (ministra) de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, afirmó que deja tras de sí “un gran legado literario e intelectual”. La despedida En el mundo de las letras, la pérdida de Carlos Fuentes fue recibida con gran pesar. “Él tenía un sentido crítico para todo este manejo de los problemas literarios en donde la ambición está siempre en primera fila”, dijo a Efe el poeta y novelista colombiano Álvaro Mutis. “Era magnífico para colocar a cada quien en su lugar, a cada escritor en su lugar”, dijo Mutis, también amigo del escritor colombiano Gabriel García Márquez, quien vive la mayor parte del tiempo en la capital mexicana. La obra de Fuentes incluye también títulos como La región más transparente (1958), La silla del Águila (2003) y La voluntad y la fortuna (2008), sobre la violencia ligada con el narcotráfico. El autor dejó prácticamente listos para su publicación dos trabajos, un ensayo centrado en personas que más influyeron y ya fallecidos, y una novela que verá la luz en noviembre. El primero de esos libros llevará por título Personas y es un ensayo que será publicado en junio, dijeron las fuentes de Alfaguara en la ciudad de México. Sobre este ensayo, prácticamente ultimado, Fuentes decía que se tenía que “apurar a publicarlo” porque contiene impresiones del escritor en torno a casi una veintena de personas, todas ellas ya fallecidas, que habían sido importantes en su vida. Además, Fuentes tenía previsto lanzar una nueva novela, Federico en su balcón, en la que planteaba un diálogo con el filósofo alemán Friedrich Nietzsche y que esperaba presentar a todo dar en noviembre próximo en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL). Aunque nunca consiguió el preciado Nobel de Literatura de la Academia sueca, Carlos Fuentes recibió en 1994 el premio Príncipe de Asturias y en 1987 el Cervantes, entre otros galardones. Entre los pésames difundidos públicamente figura el de la cantautora costarricense nacionalizada mexicana Chavela Vargas, amiga del autor, quien en un mensaje por Twitter solo dijo: “Silencio, por favor: mi gran amigo Carlos Fuentes se fue” ENFOQUE Fue un hombre universal Mario Vargas Llosa Acabo de enterarme de la muerte de Carlos Fuentes y me ha dado mucha pena. Con él desaparece un escritor cuya obra y cuya presencia han dejado una huella profunda. Sus cuentos, novelas y ensayos están inspirados principalmente por la historia y la problemática de México, pero él fue un hombre universal, que conoció muchas literaturas, en muchas lenguas, y que vivió de una manera comprometida con todos los grandes problemas políticos y culturales de su tiempo. Fue siempre un gran promotor cultural y trabajó incansablemente por unir a los escritores y lectores de nuestra lengua a ambas orillas del Atlántico. Era un gran trabajador, disciplinado y entusiasta, y al mismo tiempo un gran viajero, con una curiosidad universal, pues se interesaba por todas las manifestaciones de la vida cultural y política y escribía sobre todo con brillantez y buena prosa. No solo sus amigos sino también sus muchos lectores lo vamos a extrañar. ? (Mensaje enviado al Twitter) Ensambló palabra y tema social Oswaldo Reynoso Después de haber leído a Miguel Ángel Asturias y Alejo Carpentier, leí a Carlos Fuentes, entonces un escritor muy joven, sin embargo me causó la misma impresión que haber leído a esos dos grandes precursores de la literatura latinoamericana. La novela que leí de Fuentes fue Aura y después La muerte de Artemio Cruz, en la que introduce nuevas técnicas. Pero en ese ensamble de estructura y palabra, Fuentes también hace un maravilloso trabajo de utilizar los recursos literarios para contar, narrar aspectos sociales profundos de la sociedad de su país, como, por ejemplo, la revolución mexicana. Frases del maestro “La función del escritor no es aplaudir a los políticos, sino criticar, en el buen sentido de la palabra, y ofrecer soluciones”. “Los novelistas quisiéramos ser exorcistas de los males de la sociedad y acabamos siendo profetas”. “Cervantes te permite saber lo que no puedes hacer como escritor, porque él ya lo hizo mejor, pero también te da pistas de lo que puedes hacer, porque él abrió el camino”. “La gran aportación del boom latino-americano fue escribir un puñado de buenos libros que han aguantado el paso del tiempo y liberar a la novela de la herencia naturalista y realista del siglo XIX”. “México es la nueva frontera del narcotráfico. Lo fue Colombia durante mucho tiempo, pero luego se trasladó a mi país, que es una frontera muy cómoda para los narcos por su proximidad con Estados Unidos”.