Simón Balbuena: "Me siento muy frustrado en esta Arequipa abandonada, solo vivimos de recuerdos"

"Al conejín" responde el vigilante de su urbanización cuando pregunto por Simón Balbuena Marroquín. Arequipa lo conoce con el apelativo de conejo. El sobrenombre responde a una nevada cabellera y dentadura prominente. Ejerció el cargo de alcalde de Hunter y Arequipa por 22 años, "y no tengo ninguna condena”, dice nuestro entrevistado sentado en la sala de su casa.

Balbuena está a punto de cumplir 80 años. Comenzó como periodista datero en el diario El Pueblo, dirigente de varias organizaciones y catedrático, antes de entrar a la moledora de carne llamada política.

En la década del sesenta formó parte de la Junta de Rehabilitación y Desarrollo de Arequipa sin cobrar un sol. Este organismo fue creado para levantar de los escombros la ciudad destruida por los terremotos de 1958 y 1960. La junta promovió la creación de una fábrica de cementos (hoy cementos Yura) para la reconstrucción. Se instalaron varias fábricas en el parque industrial gracias a incentivos tributarios. De ese boom no queda nada. La mayoría de las compañías partió a Lima en busca de un mercado más grande.

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Balbuena plantea retomar este modelo para descentralizar el poder económico y crear un polo de desarrollo que llegue a Chile y Bolivia. Eso obliga a concretar el gasoducto sur peruano, para tener energía barata como la tiene Lima. “No solo podríamos atender a nuestro mercado de siete millones de habitantes en el sur, sino exportar. Pagamos las consecuencias de la crisis política y social (…) Me siento muy frustrado en esta Arequipa abandonada, solo vivimos de recuerdos", refiere.

–¿Por qué pagamos las consecuencias de la crisis?

Hay mucha dejadez. Mientras el gobierno anuncia inversión importante en Lima y el norte y en Arequipa qué. El caso de Majes es patente, el gobierno interviene en el destrabe de Chavimochic.

Le recuerdo que el gobierno quiso asumir Majes II en el gobierno de Vizcarra, empero la gestión del gobernador Cáceres Lllica se opuso. Lamentablemente, sus consejeros no eran los más capacitados, retruca . También enfila su crítica al gobierno regional, le reclama obras de desarrollo y no municipales (la canchita o veredas). Denuncia que la red vial está descuidada, las autopistas solo llegan hasta Ica.

La Democracia Cristiana ha sido el único partido que acogió a Simón Balbuena como militante. La mayoría de procesos electorales los ganó como independiente. Ha tenido relación con varios jefes de Estado: Alberto Fujimori, Alan García, Ollanta Humala. etc. No lo dice él, pero prefiere no mostrar sus fotos con ellos. No debe ser ningún honor posar con personajes que están en la cárcel o perseguidos por la justicia.

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–En los noventa dijeron que usted era uno de los alcaldes favoritos de Alberto Fujimori.

Pero también hubo un grupo de periodistas que reclutaron (…) Ese contacto (con Fujimori) lo hice en beneficio de la población. Hunter necesitaba agua, desagüe y luz, asfaltado. Yo presentaba expedientes, a veces ellos financiaban todo, en otra oportunidad, debía poner el 50%, claro el Chino venía a la inauguración. Nunca fui candidato de Fujimori ni participé en una marcha a favor de él (…) También he tenido amistad con Alan García, cada vez que llegaba me decía que subiera al helicóptero.

Fracaso de transporte

Retirado en sus cuarteles de invierno no ve con optimismo el presente de la ciudad. Señala que se ha perdido la esencia de lo arequipeño. Lo atribuye a las migraciones iniciadas en la década del sesenta del siglo pasado. El terrorismo y la sequía en Puno aceleraron el proceso. Entonces el crecimiento urbano fue desordenado. “El dinero que reciben los municipios y gobierno regional se invierte en servicios a esos nuevos ciudadanos y no en el desarrollo urbano de la ciudad. Aclara, no es racista, pero cada cosa en su lugar, añade. Ese mismo espíritu de solidaridad no la tiene un cusqueño o puneño con un arequipeño, dice. "Trabajé en otras regiones, fácilmente no te aceptan, no permiten que un arequipeño llegue a ocupar cargos”, se queja.

–Usted como alcalde inició la modernización del transporte público, ¿por qué fracasó?

Alfredo Zegarra es el responsable. Él anuló la licitación de las vías troncales y creó Arequipa Bus, ese proyectó lo objetó el gobierno y ahí quedó. Desde el 2010 se hizo poco. Ya se hubiesen renovado las flotas. Hay muchos intereses e informalidad. Esta última impide que mejore el transporte. Se necesita una autoridad enérgica y fuerte. A mí me han criticado mucho por ser prepotente y malcriado a veces, pero se trabajaba con honestidad.

–¿Cómo ve el gobierno regional?

Los gobiernos regionales y municipales tuvieron muchos recursos del canon. Hubo la oportunidad de iniciar obras de gran envergadura, pero no se hizo. Yo apuesto por las obras de administración directa, pero manejar los procesos con honestidad, dar los contratos a empresas arequipeñas a las que puedo ajustarles el cuello y no a las de Lima. Una sola empresa de un señor equis ganó cerca de 700 millones para hacer los hospitales. Luego abandonó las obras. Es costumbre de este empresario hacer esto. Debe investigarse. (En otro contexto de la conversación, me dice que no cuesta nada ser honesto en política).

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–¿Debe haber cualquier cantidad de tentaciones?

Cualquier cantidad.

–Es común que las autoridades pidan sobornos

Trabajé en una empresa constructora grande. Cuando nos presentamos a una ciudad del sur, el presidente de la región de esa época, pedía mínimo ocho por ciento . Era una obra arriba de 250 millones, claro que no le pagamos.

–¿Por qué cree que la política ha perdido prestancia?

La corrupción está derrotando todo. Antes, había algunos rasgos de inmoralidad seguramente, pero no era tan notorio.

–¿Por qué Arequipa elige tan mal, por ejemplo a Caceres Llica?

Bueno, muchos nos llevamos por los sentimientos. No te olvides que la mayoría de la población arequipeña ahora tiene ascendencia altoandina.

–Pero siempre la ciudad de Arequipa fue altoandina, ¿no es costa?

Somos de la cuesta (sonríe). Bueno él aprovechó su identidad, el cholo contra los blancos. En el anterior proceso fue una sorpresa la elección de Yamila Osorio. No esperaba que Arequipa eligiera a una mujer. Era la única opción en ese entonces (2018). Había mucha esperanza, luego ya cambiaron las cosas.

–¿Y sobre Rohel Sánchez?

Tengo la impresión que no maneja bien sus comunicaciones. En los medios le dan duro y no responde. Se ha rodeado de un equipo de asesores cuestionable. Tiene la mochila pesada de la familia de su esposa, son Patria Roja, eso no se lo quita nadie. Pero, Rohel conoce la realidad, puede aprovechar los contactos internacionales que hizo cuando fue rector. Eso le ayudaría a mejorar su gestión.