Atentado en el Vraem: “Carlos” fue entrenado por el sanguinario “Alipio”
Preparado para matar. Fuentes militares y policiales consultadas señalan que ’'Carlos’' fue adoctrinado y entrenado en un campamento del Vraem. Exnarcoterroristas que ahora colaboran con las fuerzas de seguridad relatan que son sometidos a una estricta disciplina y que les enseñan a matar con fusiles de largo alcance.
Así como su padre, Martín Quispe Mendoza, lo adoctrinó y entrenó desde niño en un campamento ayacuchano para sumarse a la lucha armada senderista que se inició en 1980, Víctor Quispe Palomino repitió la experiencia desde que constituyó su propia agrupación en 1999, el Militarizado Partido Comunista del Perú (MPCP). Organizó campamentos en los que instaló ’'escuelas populares’', donde los hijos de los combatientes desde muy pequeños recibían clases de marxismo-leninismo-maoísmo, a la manera de Víctor Quispe, y aprendían a fabricar minas caseras y otros explosivos, así como a disparar fusiles Kalashnikov, Colt M4, HK-G3, FAL y Galil. Entre esos menores de edad estaba el propio hijo del cabecilla del MPCP, Víctor Quispe Zaga, y el camarada ’'Carlos’', el narcoterrorista que dirigió a la columna que asesinó a 16 personas en San Miguel del Ene, la noche del domingo 23 de mayo.
A ’'Carlos’', según relataron excompañeros de combate que ahora colaboran con las autoridades dedicadas a la lucha contra los narcoterroristas del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), siempre le fascinó el fusil de fabricación israelí Galil. Y fue precisamente con esa arma que atacó en los bares Carla y La Quebradita y dejó entre los 16 fallecidos a dos niñas de uno y tres años de edad. En las pocas fotografías en las que aparece junto con su columna, ’'Carlos’' justamente porta una Galil, muy probablemente robada en una de las emboscadas a las fuerzas de seguridad en las que intervino desde que era adolescente.
Se estima que ’'Carlos’' tiene entre 25 y 30 años, que es el rango de edad promedio de la primera generación de combatientes del MPCP formados en los campamentos de adoctrinamiento narcoterrorista.
El camarada ’'Willy’', quien se formó en los mencionados campamentos donde también se forjó ’'Carlos’', relató la vida cotidiana en dichos lugares donde nadie puede salir, y los que escapan son atrapados y eventualmente castigados con la ejecución.
’'El reglamento que teníamos que cumplir era muy estricto. Además de estudiar todo el tiempo la ideología del partido, teníamos que salir a cosechar papa para los alimentos, y después venía el entrenamiento militar. No conocíamos los juegos de los niños. Todos nos entrenábamos para matar a los enemigos de la revolución’', relató el camarada ’'Willy’', un exintegrante del MPCP, quien está bajo la protección de las fuerzas del orden.
’'Willy’' fue un ’'pionerito’' del MPCP, un niño sometido al ’'partido’' de Víctor Quispe Palomino.
Semillas de odio
’'Nuestras jornadas comenzaban a las 4 de la mañana. Todos estábamos uniformados de azul oscuro. Lo único que conocíamos del mundo exterior era lo que nos contaban los profesores que designaba el jefe del partido. Para el manejo de armas también teníamos nuestros instructores’, dijo ’'Willy’'.
Según fuentes del Comando de Inteligencia y Operaciones Especiales Conjuntas (CIOEC) y de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote), la persona que más influyó en la formación del camarada ’'Carlos’' fue Orlando Borda Casafranca, camarada ’'Alipio’', el feroz y sanguinario jefe militar de Víctor Quispe. ’'Alipio’' ‘graduaba’ a sus alumnos llevándolos a las emboscadas a patrullas de las fuerzas de seguridad y les enseñaba a darles el tiro de gracia para que se acostumbraran a ejecutar a sangre fría a sus víctimas, dijeron las fuentes consultadas. Fuentes policiales y militares no descartan que “Alipio” haya adiestrado a ’'Carlos’'.
El 13 de agosto del 2013, en una de las operaciones contraterroristas más exitosas de los últimos 20 años, ’'Alipio’' fue emboscado junto con el camarada ’'Gabriel’', Marco Antonio Quispe Palomino, hermano del cabecilla del MPCP, Víctor Quispe Palomino, camarada ’'José’'.
’'Yo comencé a disparar a los 7 años. Mi primera tarea fue matar a un perro. Era una prueba. Éramos varios niños. Cuando maté al animalito, el camarada “José” me felicitó. Y me dijo: ‘Serás muy útil para el partido’’', relató el exintegrante del MPCP, el camarada ’'Edwin’', también colaborador de las fuerzas del orden.
’'Carlos’' tiene todas las características del malvado camarada ’'Alipio’'. No le interesaba en lo absoluto cumplir con su cometido, así se encontrara en el camino con niños, como sucedió en San Miguel del Ene.
Conforme fue creciendo, ’'Carlos’' también fue escalando posiciones, reemplazando en algunos casos a sus mayores caídos en combate. De acuerdo con las fuentes militares y policiales consultadas, es el noveno en la línea de mando del MPCP.
Después de la muerte por enfermedad de Jorge Quispe Palomino, camarada “Raúl”, en enero de este año, “José” decidió ascender a “Carlos” para que cumpliera misiones como ’'mando político’' de una columna junto con el camarada ’'Anselmo’', encargado de las acciones armadas por su amplia experiencia. ’'Carlos’' es el encargado de la ’'fuerza de avanzada’', cuyas zonas de acción son las jurisdicciones de los distritos de Vizcatán del Ene, en Satipo, Junín; y Canayre, en la provincia ayacuchana de Huanta.
Coca y miedo
Tanto Vizcatán del Ene y Canayre son distritos colindantes por la parte norte del Vraem y solo los separa el río Mantaro. Ambas son zonas de acción del MPCP a cargo del camarada “Carlos”. En ese territorio se ubica San Miguel del Ene, donde se produjo la masacre en los bares Carla y La Quebradita.
“Orejitas”, como también lo llaman sus compañeros de la organización narcoterrorista MPCP, se caracteriza por ser muy violento y de decisiones terminantes, conductas aprendidas en los campamentos de adoctrinamiento.
El camarada ’'Basilio’', exintegrante del MPCP, informante de las fuerzas antiterroristas, confirmó que por órdenes del camarada ’'José’' emboscaban a contingentes de la policía en represalia porque incautaban droga que salía del Vraem o interceptaban camiones con insumos químicos.
’'Nos decía que había que emboscar a la policía porque jodían mucho. Por ejemplo, cuando intervenían a los ‘mochileros’ (transportadores de droga). La consigna era matar y arrebatar las armas a policías y militares’', relató ’'Basilio’'.
De acuerdo con inteligencia del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y de la Dircote, el camarada “Carlos” participó en el ataque a tres embarcaciones hovercraft de la Marina de Guerra, cuando desplegaban acciones de control en los ríos del Vraem.
El hecho se registró el 21 de diciembre del 2020, en la zona del Vizcatán del Ene, donde resultó muerto el oficial de mar Gustavo Valladares Neyra y fueron heridos otros tres marinos.
Cocaleros. Los narcoterroristas obligan a los agricultores a entregar una arroba de hoja de coca. Foto: Virgilio Grajeda / La República
Los ataques de los narcoterroristas son abiertamente en defensa de las actividades del narcotráfico en el Vraem, donde la producción se ha incrementado notoriamente. Gran partes de los agricultores del área se dedican a la producción de hoja de coca, que casi en su totalidad se destina a la elaboración de pasta básica de cocaína. De acuerdo con cálculos de la entidad Devida, al año en el Vraem se producirían 450 toneladas de droga.
Reportes de la Dirección Antidrogas (Dirandro) señalan que Vizcatán del Ene está considerado como una zona de influencia del narcoterrorismo, debido al alto tránsito de elaboración de pasta básica de cocaína. Vizcatán del Ene está ubicado en la margen izquierda del río Ene, a 630 metros sobre el nivel del mar, con una población de 4.800 habitantes, y tiene como capital a San Miguel del Ene.
Está conformado por los centros poblados de Valle Hermoso, Mazangaro, Nueva Libertad, América, Los Ángeles, Paquichari, Montaño, Jesús Belén, Mantaro, Amazonas, Alto Vizcatán, Tununtuari, José Olaya, entre otros.
Los pobladores de Vizcatán del Ene se dedican al cultivo de hoja de coca, que va directamente al narcotráfico, y el control lo ejerce el camarada ’'José’'.
“Los cocaleros del Vraem entregan una arroba de hoja de coca por hectárea al partido (MPCP). En el Vraem todas las autoridades dan cuenta y trabajan con el partido, y si no hacen caso los matan”, dijeron fuentes militares que operan en la zona: ’'A los terroristas que están al servicio del narcotráfico se les llama narcoterroristas. Eso es lo que son’'.
El dato
’'Carlos’' tendría entre 25 y 30 años de edad y pertenece a la primera generación que salió de los campamentos del Vraem.
Sagasti: “Se castigará a los que hicieron esta barbarie”
Presidente. Sagasti: ''Habrá respuesta por la masacre''. Foto: Sepres
El mandatario Francisco Sagasti se desplazó a la base de Mazamari, en Satipo, Junín, para escuchar el informe del jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA), general EP César Astudillo, sobre las acciones en respuesta a la organización criminal MPCP que asesinó a 16 personas en San Miguel del Ene.
’'Nos han informado de la situación actual, cómo ha sido este hecho, el ataque, que ya conocen todos ustedes, así como las medidas que se están tomando para evitar que esto vuelva a suceder. Y, además de eso, para castigar a quienes han perpetrado este acto de barbarie”, indicó Sagasti.
“Tengan por seguro que esto no quedará impune y que las Fuerzas Armadas y las fuerzas policiales están trabajando conjuntamente para proteger a toda la ciudadanía en esta zona”, indicó el presidente.
El miércoles al mediodía, tres días después de los hechos, un contingente de efectivos del Ejército y de la Marina se desplegaron en San Miguel del Ene para evaluar la zona e iniciar operaciones de persecución.