Se trataría de una represalia de la facción armada contra las compañías que se resisten a pagar “cupos” para continuar trabajando en la selva cusqueña. Ahora seguirían sabotajes al gasoducto.Ataque en echarate., Ángel Páez y Elías Navarro, Huamanga. El jefe terrorista Martín Quispe Palomino , “ camarada Gabriel ”, cumplió con su amenaza de atacar a las empresas que prestan servicios a los operadores del gas de Camisea , y quemó tres helicópteros que se encontraban apostados en el aeródromo de Kiteni , en el distrito cusqueño de Echarate . Los senderistas rompieron el cerco metálico para irrumpir en las instalaciones y se dirigieron directamente a las aeronaves –dos de la compañía Servicios Aéreos de Los Andes y una de Helisur –, colocaron cargas explosivas y destruyeron las máquinas que trasladaban al personal de Transportadora de Gas del Perú (TgP), que se encarga de vigilar el funcionamiento del gasoducto que se inicia en el yacimiento de Camisea . Los hechos ocurrieron en la primera media hora de ayer sábado, en la cerrada noche de la selva cusqueña. Los terroristas de la agrupación que dirige el “ camarada José ”, Víctor Quispe Palomino , hermano del “camarada Gabriel”, han escalonado sus acciones contra las empresas que ofrecen sus servicios a TgP. El 9 de abril de este año, “Gabriel” y sus secuaces plagiaron a 32 trabajadores de la firma Skanska , que labora para TgP . Aunque en un principio el cabecilla reclamó un rescate de 12 millones de dólares, a los pocos días dejó en libertad a los secuestrados. Luego, el 6 de junio, otra columna bajo el mando de “Gabriel” incursionó en una base de TgP en Kepashiato , retuvo a ocho operarios y pintarrajeó con lemas terroristas helicópteros y avionetas de Servicios Aéreos de Los Andes que se encontraban en el lugar. AMENAZA SENDERISTA En esa ocasión el líder senderista advirtió que “si la empresa no cumplía, seguirán más acciones”, en alusión al supuesto pago de “cupos” que la organización reclama a los operadores de Camisea. El siguiente paso de la campaña terrorista contra las empresas que trabajan en el yacimiento gasífero sería el sabotaje al gasoducto o a la infraestructura de operación y control de la misma. Lugareños consultados dijeron a La República que pudieron reconocer entre los atacantes al “camarada Gabriel”, a quien vieron por televisión cuando fue interceptado por periodistas en abril de este año, después de la liberación de 32 trabajadores de Camisea . Dos días antes del ataque a los helicópteros, los terroristas arribaron a la zona y se mimetizaron como pobladores del lugar, en un área de bosque enmarañado y accidentado. “La gente había visto a un grupo bien armado con fusiles y explosivos. Dijeron que ingresaron por la chacra de la familia Rojas. Temiendo que algún atentado iba a ocurrir, algunas familias salieron de miedo de esta zona”, dijo a este diario un poblador de Kiteni. DIRECTO A LAS NAVES Según fuentes de la policía, José Matallana Gárate (50), de la compañía Security Coga Kiteni , fue quien reportó la incursión de 25 a 30 senderistas en el interior de las instalaciones del aeródromo, ubicado en el sector de Alto Kiteni. Provistos de fusiles Kalashnikov y Galil , los senderistas redujeron a los trabajadores de seguridad Raúl Palacios Tacure y Octavio Mamani Túpac . Mientras los mantuvieron cautivos, colocaron artefactos explosivos a los tres helicópteros que había en el lugar. Las aeronaves afectadas son un Bell 212 , de matrícula OB-1845, y un Mi-17 de matrícula OB-1586, ambas de propiedad de Servicios Aéreos de Los Andes . El tercer aparato es un Eurocopter AS350 B3 , de matrícula OB-1949P, de Helisur. Los senderistas ingresaron al aeródromo por una carretera afirmada de acceso hacia el sector de Alto Kiteni. Con un hacha cortaron la malla metálica que sirve de perímetro de seguridad de la pista de aterrizaje del aeródromo. La policía halló el hacha en los alrededores. Los subversivos también colocaron otro artefacto explosivo en el interior de las instalaciones del local de seguridad, con lo que destruyeron la cabina de control del personal. Al escuchar la fuerte detonación y explosión , los empleados de seguridad salieron despavoridos. A las dos de la madrugada los senderistas se retiraron luego de perpetrar el ataque. Robaron equipos de comunicación y víveres de los trabajadores. A las siete de mañana, llegó a Kiteni las Fuerzas Especiales Combinadas (FEC), al mando de un comandante. EN RIESGO EL FLUJO DE GAS La compañía Transportadora de Gas del Perú (TgP) informó que debido a la destrucción de los tres helicópteros en Kiteni, que pertenecían a dos empresas que trasladaban a trabajadores para la operación y mantenimiento del gasoducto, podría ponerse en peligro el normal funcionamiento de la infraestructura. Según TgP, el sabotaje senderista ha obligado a paralizar las labores de mantenimiento del gasoducto, lo que significa que, si se presenta una situación de emergencia, difícilmente podría atenderse, por lo que el transporte del gas podría afectarse. La empresa informó que los sucesivos ataques terroristas dañan las actividades necesarias para asegurar el sistema de transporte de gas y que desde abril se han detenido los trabajos de instalación de un ducto paralelo y la construcción de una planta compresora para aumentar la oferta de gas. TgP urgió al gobierno tomar medidas inmediatas para garantizar la seguridad en la zona.