La Organización de las Naciones Unidas (ONU) inauguró este martes su nueva sede en el Perú, que lleva el nombre de su ex secretario general Javier Pérez de Cuellar, homenajeado hoy al cumplir 90 años. La inauguración de la sede, que reunirá en un mismo lugar a ocho agencias de la ONU, contó con la presencia de Pérez de Cuellar, del presidente peruano, Alan García; del canciller del país, José Antonio García Belaunde, y de otros personajes de la política, la diplomacia y la cultura peruana, como el escritor Mario Vargas Llosa. El "Complejo Javier Pérez de Cuellar" está ubicado en un área de 25.374 metros cuadrados en la antigua sección de Climática de Varones del Puericultorio (orfanato) Pérez Araníbar, en el distrito costero limeño de Magdalena. El coordinador residente de la ONU en el Perú, Jorge Chediek, destacó durante la concurrida ceremonia que la nueva sede "es una de las mejores oficinas" en el mundo y esperan que se convierta "en un punto de encuentro para mejorar la condición del desarrollo humano en el Perú". "Será un estímulo trabajar en esta casa que lleva el nombre de quien es una inspiración", remarcó en alusión a Pérez de Cuellar, quien fue secretario general de la ONU en dos periodos consecutivos, entre 1982 y 1991. Durante la ceremonia, tres miembros de los "Cascos Azules" mostraron la placa que llevará el recinto y el ex secretario general y el presidente García cortaron una cinta simbólica de inauguración. Previamente, el secretario adjunto de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL), Antonio Prado, leyó un mensaje del actual secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien destacó la trayectoria de su predecesor peruano. "Es muy apropiado que este complejo histórico reciba el nombre del gran benefactor que el Perú ha dado a la humanidad", remarcó Ban en su mensaje. Destacó que Pérez de Cuellar "ha dedicado su vida a promover los ideales y los objetivos de las Naciones Unidas. Como hombre de paz, dirigió la organización procurando siempre reducir las tensiones y establecer en todo el mundo un nuevo clima de consenso". A su turno, el ex secretario general agradeció el "brillante acto" de homenaje que, según dijo, excedió a sus "merecimientos". "Este es un homenaje no al veterano diplomático que soy, sino a la centenaria diplomacia peruana", señaló, para luego recordar que hace 70 años inició su carrera en el Palacio de Torre Tagle, la sede de la Cancillería peruana. Pérez de Cuellar manifestó también su sorpresa porque, en su opinión, lo han convertido "en una suerte de paradigma de no se qué virtudes" y aclaró que si una tiene es "el patriotismo". "Ignoraría mi vejez si la patria así me lo demandara", concluyó emocionado para luego ser ovacionado de pie por los invitados a la ceremonia. (EFE)