Congresista de la bancada Fuerza Popular dio su declaración a fiscal José Domingo Pérez, quien consideró que su interrogatorio fue útil para su investigación. El parlamentario fujimorista dejó de ser testigo protegido. ,El fiscal José Domingo Pérez interrogó al congresista de Fuerza Popular, Miguel Castro, quien habría confirmado su participación en la "legalización" de presuntos aportes de Odebrecht a la campaña de Keiko Fujimori. Pérez Gómez llegó al despacho del legislador fujimorista a las 10 de la mañana para tomar su declaración. PUEDES VER Dictan 36 meses de arresto domiciliario contra Adriana Tarazona [VIDEO] Como se recuerda, Castro era testigo protegido, pero él mismo solicitó ya no estar bajo esa figura. Incluso, el fujimorista fue quien solicitó al fiscal ser interrogado solo como testigo en su despacho congresal, ubicado en el Jirón Huallaga, Cercado de Lima. Al finalizar la audiencia, Pérez no reveló si el parlamentario ratificó sus declaraciones iniciales. "No voy a hablar sobre aspectos anteriores... Pero sí señalo que es pertinente y útil para el objeto de la investigación", dijo el fiscal al abandonar la oficina parlamentaria del fujimorista. Sin embargo, trascendió que Miguel Castro Grández habría ratificado la versión que brindó cuando era testigo protegido. En esa oportunidad admitió haber firmado recibos, al igual que otros presuntos aportantes fantasmas, como si hubiera entrega dinero para la campaña presidencial de Keiko Fujimori. Castro habría aceptado parte de su responsabilidad, y por ello el abogado de Jaime Yoshiyama, Humberto Abando, no se quedó en todo el interrogatorio al congresista de Fuerza Popular. PUEDES VER Dictan 36 meses de impedimento de salida del país contra Carmela Paucará No fue allanamiento El fiscal aclaró que solo se interrogó a Castro y no hubo un allanamiento como varios medios informaron. "Quiero corregir esa mala información que se ha brindado. Lo que se ha llevado a cabo es una diligencia de declaración testimonial del congresista Castro Grández, atendiendo una solicitud que había recibido el despacho fiscal de parte de esta persona para que se reciba su declaración", aseguró el magistrado. En el interrogatorio también estuvieron Giulliana Loza, abogada de Keiko Fujimori; el representante de Jorge Yoshiyama, Allem Rodas; y la defensa de Jaime Yoshiyama, Humberto Abanto. Al respecto, el fiscal José Domingo Pérez precisó que los letrados hicieron las preguntas que consideraron pertinentes para su defensa. PUEDES VER Ipsos: el 84% cree que Keiko Fujimori es culpable de liderar una organización criminal La portátil 'naranja' Un grupo de fujimoristas, algunos vistiendo un polo estampado con el rostro de Keiko Fujimori y arengaba frases contra Pérez, apareció en los exteriores del edificio donde queda el despacho de Miguel Castro. Cuando los abogados de Keiko Fujimori y Jaime Yoshiyama abandonaron el lugar, este grupo de fujimoristas aplaudía y exclamaba frases a favor de los letrados. Sin embargo, cuando José Domingo Pérez salió del edificio, la portátil fujimorista lo rodeó y mientras declaraba a la prensa, comenzó a lanzar arengas en su contra y hasta lo llamaron "terruco". No obstante, Pérez ni se inmutó y siguió conversando con los periodistas. El congresista Miguel Castro no declaró a la prensa. Lo dicho por Castro no cambiará La versión que ofreció ayer Miguel Castro como testigo no afectará lo que ya declaró como testigo protegido. En ese sentido, se informó que, aunque existan algunas diferencias entre ambas declaraciones, las dos tienen validez para el fiscal encargado del caso. Cabe precisar que Miguel Castro ya afirmó, con anterioridad, que participó y captó a dos personas para que se hagan pasar por aportantes de la campaña de Keiko Fujimori. Asimismo, Jorge Barata aseveró ante los fiscales peruanos que Odebrecht aportó US$ 1 millón a la campaña de Keiko en 2011, a través de Jaime Yoshiyama, entonces secretario general de Fuerza 2011, y del exministro Augusto Bedoya. Sin embargo, en el fujimorismo niegan estas afirmaciones e insisten, sin pruebas, que existe una percusión política contra Keiko, quien se encuentra bajo prisión preventiva por este caso.