Informe del Gobierno ruso contradice a Putin y alerta que la vacuna anunciada no es segura
Documento del Instituto Gamaleya de Moscú, donde se desarrolló la vacuna, también advierte sobre efectos secundarios y que se desconoce su eficacia epidemiológica.
La vacuna contra el coronavirus de Rusia, aclamada por el presidente Vladimir Putin, no es segura y tiene efectos secundarios que incluyen hinchazón, fiebre y dolor, según un informe publicado el martes 11 de agosto en la web del ministerio de Salud de la Federación Rusa.
En el documento, el Gobierno señala que el antídoto, bautizado como Sputnik V, se había probado en muy pocos voluntarios “durante un tiempo demasiado corto” para evidenciar su eficacia epidemiológica, y advierte que aparecieron efectos secundarios en “mucha o demasiada frecuencia”.
“No es posible definir la ocurrencia de eventos adversos con mayor precisión debido al número limitado de participantes en la investigación”, se lee en el informe del instituto Gamaleya, que desarrolló la vacuna y en cuyos ensayos participaron 38 voluntarios durante 42 días.
Hinchazón, hipertermia, letargo, dolores de cabeza, picazón en el lugar donde se aplicó, disminución del apetito, diarrea y síntomas similares a los de un resfriado aparecen en la nómina de interacciones y efectos secundarios.
En el transcurso de los ensayos, además, hubo 144 “eventos adversos”, de los cuales más de 30 estaban en curso, recoge Telegraph.
La vacuna rusa ―se especifica también— está contraindicada para menores de 18 años, mayores de 60, embarazadas, madres en período de lactancia o personas con una variedad de condiciones de salud subyacentes.
Incluso se desconoce “cómo podría reaccionar con otros medicamentos” y “cuánto duraría la protección”, pese a las afirmaciones de funcionarios rusos de que proporciona inmunidad durante dos años.
La vacuna está siendo elaborada por de Binnofarm en Zelenogrado (región de Moscú). Foto: AFP.
Sputnik V: ¿A quiénes alerta el informe?
La publicación pone énfasis en quienes sufran enfermedades crónicas del hígado y los riñones, diabetes, enfermedades graves del sistema hematopoyético (encargado de la formación de la sangre), cuadros epilépticos, accidentes cerebrovasculares y otras patologías del sistema nervioso central.
Además de pacientes que presenten males en el sistema cardiovascular, inmunodeficiencias primarias y secundarias, enfermedades autoinmunes, enfermedades pulmonares, asma y EPOC en pacientes con diabetes y síndrome metabólico, con reacciones alérgicas, atonía, eczema.
En el caso de embarazadas y mujeres en período de lactancia, se enfatiza que la Sputnik V está contraindicada “ya que no se ha estudiado su eficacia y seguridad durante este período”.
Vladimir Putin y escepticismo en vacuna rusa
Aunque Vladimir Putin aseguró que una de sus hijas había sido vacunada con la Sputnik V, el mundo ha reaccionado con escepticismo y prudencia al anuncio de Rusia sobre la primera vacuna “eficaz” contra el coronavirus.
Vladimir Putin
“La OMS está en contacto con científicos y autoridades rusas y espera con impaciencia analizar los detalles de los ensayos” clínicos, indicó la organización internacional en un comunicado.
“Acelerar la investigación (para la obtención) de la vacuna debería realizarse siguiendo los procedimientos establecidos en cada etapa de la puesta a punto para asegurarse que todas las vacunas que finalmente se producirán serán al mismo tiempo seguras y eficaces”, añadió la OMS, que pidió además “un acceso rápido, justo y equitativo en el mundo entero” al antídoto.
En esa línea, el ministerio de Salud de Alemania también emitió sus dudas sobre la “calidad, la eficacia y la seguridad” de la vacuna rusa, mientras el experto francés François Balloux, de la University College de Londres, calificó la iniciativa de “decisión irresponsable e imprudente”.
Mientras tanto, el coronavirus prosigue imperturbable su carrera homicida. Más de 737.000 muertos y de 20 millones de personas han sido infectadas desde que surgió en China a finales de diciembre, según un recuento de la AFP.
Estados Unidos sigue siendo el país más golpeado, con más de 163.000 muertos y cinco millones de infectados, por delante de Brasil, con más de 101.000 decesos y más de tres millones de contagios.