Justicia lo liberó por “ser muy viejo”, salió de prisión y asesinó a una mujer delante de sus hijos [FOTOS]

En 2010, un juez de Estados Unidos lo condenó a 4 años de prisión por haber apuñalado con un tenedor a una mujer.

La pena pudo haber sido mayor, pero el magistrado consideró que por sus avanzados 68 años, Albert Flick ya no sería un peligro para la sociedad, pese a que no era la primera vez que cometía un crimen que lo llevara a la cárcel.

En 1979 había sido condenado a 25 años de pena privativa de la libertad por haber asesinado a su esposa delante de su hija.

Según recogió la cadena CNN de los Estados Unidos, Albert Flick salió de la cárcel en 2004 y solo tres años después volvió a cometer otro delito que lo privó nuevamente de su libertad por poco tiempo.

Al salir de prisión en 2010, le clavó un tenedor en el cuerpo a una mujer y el juez Robert Crowley le argumentó que: "En algún momento, el señor Flick va a envejecer de su capacidad para involucrarse en esta conducta, y encarcelarlo más allá del tiempo en que envejece no me parece que tenga sentido”.

Por esa razón el anciano fue puesto en libertad en 2014, pero 4 años más tarde volvería a asesinar a su esposa delante de sus hijos gemelos en una lavandería en Lewiston, Maine, Estados Unidos.

Su víctima se llamaba Kimberly Dobbie. Según la fiscalía, tras haber salido de prisión y haberse mudado a Lewiston, el anciano se había obsesionado ella.

La perseguía e incluso comió en el refugio para personas sin hogar donde Kimberly Dobbie se alojaba. Ella recibió 14 heridas de arma blanca en el corazón y un pulmón.

Pese a que se declaró inocente, esta vez el juzgado de los Estados Unidos ya no se compadeció de él. Los miembros del Tribunal lo declararon culpable y ahora enfrenta otra condena de 25 años.

“Nosotros, la familia y los amigos de Kim Dobbie estamos muy satisfechos con el veredicto del jurado”, dijo en un comunicado el subsecretario de Justicia de Maine Robert Ellis. “El señor Albert Flick la mató a puñaladas de una manera similar a como asesinó a su esposa Sandra en 1979. Al menos hay cierto nivel de justicia en su condena”.