Economía

Aumento del sueldo mínimo debe ser progresivo para superar línea de pobreza

Pese al rechazo de gremios empresariales, centrales sindicales sostienen que el incremento del sueldo mínimo debería ser de S/1.330. Luego, se tiene que avanzar hacia la institucionalización de la RMV. 

Existe un mandato constitucional para que la RMV cubra la canasta básica familiar. Foto: composición de Jazmin Ceras/LR/Andina
Existe un mandato constitucional para que la RMV cubra la canasta básica familiar. Foto: composición de Jazmin Ceras/LR/Andina

La última vez que se incrementó la remuneración mínima vital (RMV) en el Perú fue en el 2022. En aquella oportunidad, el gobierno de Pedro Castillo publicó el Decreto Supremo 003-2022-TR, mediante el cual elevó el salario básico de S/930 a S/1.025. Desde entonces, el Consejo Nacional del Trabajo (CNTPE) no ha podido aterrizar una propuesta de consenso para su revisión técnica.

Pese a los intentos por abordar este tema en la Comisión Especial de Productividad y Salarios Mínimos (CEPSM), el desacuerdo primó entre las centrales sindicales, los gremios empresariales y el Estado. Los primeros denunciaron que el Poder Ejecutivo redujo de S/120 a S/105 su propuesta de elevar la RMV sin justificación técnica suficiente, mientras que los segundos aseguraron que una medida como esta no debería hacerse con cálculo político.

“Los que están haciendo política son ellos porque los argumentos que están usando no tienen consistencia técnica y pretenden generar pánico en la micro y pequeña empresa, así como en la mayoría de autoempleados. Lo cierto es que aplicada la fórmula que ya existe en el 2007, el actual valor debería ser no menos de S/1.330, que es la cifra que los trabajadores hemos propuesto”, indicó a este medio Julio César Bazán, presidente de la CUT Perú.

Por su parte, Gustavo Minaya, secretario adjunto de la CGTP, recordó que existe un acuerdo desde el 2007 en el CNTPE que establece que todos los incrementos de la RMV deberían ser progresivos hasta alcanzar el monto de la canasta básica de consumo familiar, que está fijada en S/1.784 al 2023.

De darse un aumento del sueldo mínimo acorde con las propuestas del Ejecutivo entre S/1.130 y S/1.145, tanto Bazán como Minaya aseguran que “sería irrisorio para las necesidades de la gente y los mantendría en condición de extrema pobreza”. En esa línea, continuarán exigiendo en todos los espacios de diálogo y en las calles la mejora de la capacidad adquisitiva de los trabajadores. Precisamente, la CGTP alista una movilización para el próximo martes 10 de diciembre.

Fórmula pendiente

Para el cálculo de la RMV, se deben considerar factores como la inflación y la productividad, los cuales están fijados en el mecanismo técnico de revisión que aprobó el CNTPE en el 2007. Según el exviceministro de Promoción del Empleo Fernando Cuadros, el salario mínimo debería alcanzar a la fecha S/1.330; es decir, S/305 adicionales.

“El problema está en que no hay ningún mecanismo técnico vinculante que elimine cualquier tipo de arbitrariedad. Hay que esperar qué decide el Gobierno, ya que este incremento, así sea de S/105 o S/120, es insuficiente y mantendría a los trabajadores por debajo de la línea de pobreza extrema. Recordemos que el mínimo ha perdido el 14% de su valor en los últimos seis años”, explicó.

Para graficar esta situación, puso el siguiente ejemplo. Un trabajador que gana el sueldo mínimo vital, está sujeto a descuentos por el aporte de pensiones y otros beneficios sociales, lo cual termina configurando un monto de S/890, valor que está por debajo de la canasta básica familiar y de la línea de pobreza extrema.

Pese a este diagnóstico, agregó que existen las condiciones favorables para elevar la RMV, teniendo en cuenta las cifras de recuperación del PBI de los últimos meses (3%), la trayectoria de la informalidad laboral y la tasa de empleo que viene reduciéndose.

Ahora, quien deberá resolver el destino del sueldo mínimo es la presidenta Dina Boluarte, que haría este anuncio antes de finalizar el año. Una vez publicado el Decreto Supremo, el CNTPE tendría que retomar el próximo año la discusión de los criterios técnicos para contar una política institucionalizada de fijación de la RMV.