Empleo formal privado se desaceleraría hacia el 3% en lo que resta del 2023
Resultado obedecería al agotamiento del catch up de los sectores más afectados por la pandemia y a la caída esperada de la inversión privada, según el BCP.
El empleo formal privado en febrero del 2023 creció 5%, según la Planilla Electrónica (Plame). El fuerte dinamismo estuvo impulsado por el catch up de las actividades más afectadas por la pandemia (servicios: +6,9% y comercio: +4,8%) y el mejor desempeño del sector agroexportador (+5,2%), explica el Área de Estudios Económicos del Banco de Crédito del Perú (BCP).
También contribuyeron, aunque con menor dinamismo, manufactura (+3,3%) y minería (+1,6%), mientras que hubo una caída en construcción (-8,8%).
Sin embargo, en su reporte macroeconómico semanal la entidad bancaria señala que, en lo que resta del año, se prevé una desaceleración del empleo formal privado hacia 3%.
El resultado obedecería al agotamiento del catch up de los sectores más afectados por la pandemia, la caída esperada de la inversión privada y una mayor rigidez en la legislación laboral decretada por la administración anterior. "En ese contexto, presumiblemente el subempleo en Lima Metropolitana seguirá por encima de su nivel prepandemia", indica en su reporte el BCP.
Comportamiento de los salarios
Los salarios nominales en el sector formal privado crecieron 4,2% en febrero del 2023, pero en términos reales, deflactados por el IPC nacional, cayeron 4,4%, anotando 11 meses consecutivos en negativo. Así, sin considerar efectos estacionales, los sueldos reales han mostrado una tendencia opuesta al empleo desde mediados de 2021, menciona el BCP.
Por su parte, salarios nominales en el sector formal e informal de Lima Metropolitana rebotaron 12% en el periodo enero/marzo-2023 (S/1.841) y, en términos reales, deflactados por el IPC de la capital, crecieron 3,1%. Sin embargo, en términos reales aún se encuentran lejos de su nivel prepandemia (-11% vs. ene/mar-19 y similar al nivel real de 2011).
Los sueldos de los trabajadores dependientes e independientes crecieron a un ritmo similar, tanto en términos nominales (+12%) como reales (+3%), aunque aún mantienen una brecha notoria en niveles (dependientes: S/2.007 vs. independientes: S/1.546)