2019: lo bueno, lo malo y lo feo
En el caso de Arequipa, se ha dejado de utilizar más de 700 millones de soles y no se ha generado ningún nuevo proyecto; lo poco que se ha hecho es herencia de la gestión anterior.
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Patricio Quintanilla Paulet
Rector U. La Salle
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Estamos terminando un año complicado, que nos ha traído muchas sorpresas, buenas y malas, que justifican el título de esta columna, con un análisis centrado en los aspectos económicos.
Lo Bueno
El Banco Central de Reserva del Perú (BCR) ha tenido un manejo monetario impecable, por lo que la inflación ha estado totalmente controlada, con una tasa ligeramente inferior a la meta de 2% anual; como una medida reactivadora ha reducido la tasa de interés de referencia, reduciéndose de 2.50% al inicio del año a 1.75% al cierre del año.
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En el campo externo, en el año 2019, las Reservas Internacionales Netas (RIN), aumentaron de USD 60 100 millones de dólares a USD 68 200 millones, lo que representa una variación de 13.4% en el año y que equivale a cinco veces el valor de la deuda externa de corto plazo del país, lo que demuestra la gran estabilidad externa del Perú.
La Balanza Comercial (diferencia entre exportaciones e importaciones) tiene un saldo positivo de USD 6 560 millones de dólares, a pesar de los bajos precios de los commodities.
Lo Malo
El peor indicador económico ha sido la tasa de crecimiento del Producto Bruto Interno. Al inicio de año (marzo 2019) el BCR proyectó un crecimiento de 4.0% en el año y en el último Reporte de Inflación (diciembre 2019), el estimado es de solamente 2.3%, atribuible en parte a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, pero también a factores internos como la baja inversión pública, que disminuyó en 0.5% en el año.
El “ruido político”, con todos los hechos que conocemos, ha tenido también impacto en el bajo desempeño del PBI, por la postergación de importantes proyectos de inversión, especialmente en las diferentes regiones del país.
En el caso de la Región Arequipa, se ha dejado de utilizar más de 700 millones de soles y no se ha generado ningún nuevo proyecto; lo poco que se ha hecho es herencia de la gestión anterior, que se ha ejecutado de manera parcial.
Lo Feo
Es muy probable (espero estar equivocado) que este año la pobreza aumente. Según investigaciones realizadas, la reducción de la pobreza depende de dos factores, el crecimiento del PBI y los programas sociales. La desaceleración económica afectará el nivel de pobreza, tal como sucedió en el año 2017, en una situación similar. Este es uno de los problemas pendientes de atención, que es menor que en otros países de la región, pero no por eso deja de ser muy importante.
La relación entre política y economía es innegable y por ello los desórdenes del país, con las consecuencias que todos conocemos, han afectado a los pobres resultados del 2019. Con una cierta vinculación, la corrupción generalizada ha llevado a postergar y detener importantes proyectos de inversión, afectando igualmente el crecimiento.
Conclusión
Hagamos votos porque en el próximo año se superen los problemas y tengamos mejores resultados.
