Tévez sobre una anécdota con Maradona: “Enojarte con él era como enojarte con tu papá”
Carlos Tévez recordó un divertido momento con Diego Maradona, cuando estaba internado el ‘10′ argentino por un crisis cardíaca.
En el año 2004, Diego Maradona ingresó a la Clínica y Maternidad Suizo Argentina de Buenos Aires con una crisis cardíaca agravada por una infección pulmonar. Su estado era crítico. El popular ‘D10S’ estaba intubado con la asistencia de un respirador mecánico. Su gran amigo Carlos Tévez no dudó en ir a visitarlo.
Diego era como un padre para Carlitos y no podía dejarlo solo en su peor momento. “La llamo a Claudia y le digo que quiero ir a verlo. Me dice que vaya, pero que voy a tener que entrar por atrás. Voy, lo agarro a Adrián, mi representante, y le digo que me lleve. Me dice ‘¡no, vos estás loco, está lleno de periodistas!’. Le digo que me lleve igual. Un quilombo en la Clínica, pero entro por atrás. Estaban Dalma, Gianinna y Claudia”.
El parte médico decía que el ‘10′ argentino estaba internado “por haber presentado una crisis hipertensiva, con un cuadro basal de cardiopatía dilatada”. “El doctor da el parte médico -contó Tévez-, trato de estar con las nenas, con Claudia, tranquilizarlas, volvemos donde estaba Diego y ¡se despierta! Empieza a abrir los ojos, cinco, diez minutos que no sabía dónde estaba, hasta que se recupera y le explicamos”.
El ‘Apache’ contó un divertido momento mientras estaban en esa difícil situación.“Me mira y me dice ‘a ver la bermuda, está buena eh, sácatela préstamela, me la voy a poner’. Le digo, ‘no, Diego, estás loco, cómo te voy a dar la bermuda’. ‘Sácatela, saca a las nenas, Claudia tápate los ojos, dámela que me la quiero probar’”.
“¡Me la tuve que sacar para que él se la probara! Un loquito, le entró en una pierna, no se la podíamos poner, pero él quería que se la pusiéramos... Me la llevé, ja, sino me quedaba en bóxer. Le dije ‘tienes que bajar 120 kilos para ponértela’, y se reía. Eso era Diego”, detalló entre risas.
Tévez valora que esa relación padre e hijo fue muy buena, casi no hubo distanciamientos entre ambos. El único enojo se dio a partir del penal que Carlitos se negó a patear jugando para Boca Juniors. “Fui un elegido de Diego y lo que más me gusta es que me eligió de principio a fin. Tuvimos un bache y nada más. Yo a Diego lo entendía siempre. Enojarte con él es como enojarte con tu papá. ¿Cuánto te puede durar? ¿Un día?”, finalizó.