La vida del paraguayo Salvador Cabañas luego de 10 años de su atentado en México
El ex jugador del América de México y de la selección de Paraguay trabaja hoy en día en la formación de jóvenes futbolistas.
Era uno de los jugadores más importantes del América, goleador y referente en la selección de Paraguay, hasta que una noche su vida cambió por completo. Hoy 25 de enero se cumplen 10 años de la tragedia que vivió el paraguayo Salvador Cabañas en Ciudad de México.
Al ex futbolista le dispararon en la cabeza dentro del baño de un bar, lugar al que asistió con su esposa y un amigo. Cuando ocurrió el siniestro, el presunto agresor respondía al nombre de José Jorge Balderas Garza, más conocido como “JJ”.
En ese momento, “JJ” cambió la vida de Cabañas para siempre. El proyectil se introdujo en el lóbulo izquierdo de su cerebro, cayendo en coma por 10 días. Fue recién en el mes de marzo cuando inició a su rehabilitación.
Cuando volvió a su casa, su cabeza estaba con una gran cicatriz. Trató de continuar con su vida normal, pero su cuerpo ya no respondía como antes. Buscó apaciguar su dolor de todas las formas posibles: desde el aliento de fuerza de sus seguidores hasta el de su familia.
Cuando llegó el 2014, retomó su labor como jugador profesional en el club Deportivo Tanabí de Paraguay. Sin embargo, 10 días después anunciaría su retiro de las canchas.
Balderas Garza se va a prisión luego de 10 años
Durante las investigaciones, fue el propio Cabañas quién lo señaló como su agresor en la madrugada del 25. Pero “JJ” no era un simple delincuente, era parte de una organización criminal llamada “Los Beltrán Leyva”.
Dicha agrupación era una de las bandas más peligrosas de la capital mexicana. Incluso llegaron a trabajar en conjunto con el “El Chapo” Guzmán.
Sin embargo, su atacante nunca fue condenado por el crimen que cometió en contra del ex futbolista. Diez años después fue capturado y llevado a prisión por actividad narcotráfica luego que un juez le impusiera una pena de 20 años.
Cabañas y su vida como formador
Semanas después de retirarse de manera profesional del fútbol, Salvador Cabañas mandó a construir una panadería para generarse sus propios ingresos. Incluso daba clases de entrenamientos en un club de la liga paraguaya.
Después de 9 años del accidente, Salvador Cabañas volvió a México en el 2019. El “Chava” consiguió trabajo como uno de los integrantes del equipo de entrenamientos del club Chiapas.
Además, abrió una escuela de fútbol para la captación de menores. El objetivo de su academia era formar chicos con talento para luego llevarlos a los clubes de fútbol.
