Club brasileño quiere fichar a excapitán del Flamengo preso por asesinar a su pareja
Fue uno de los mejores arqueros del Brasileirao, se formó en el Atlético Mineiro, pasó por el Corinthians y brilló en Flamengo.
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Quieren sacarlo de la celda para que se pare bajo el arco. Desde Brasil llega una noticia que sorprende al mundo del deporte, un club está interesado en fichar a un futbolista que purga condena tras asesinar a su novia. Bruno Fernandes, es el nombre del jugador que ha despertado interés del Poços de Caldas FC, y que actualmente pesa sobre él 22 años de prisión.
Fernandes fue arquero del Flamengo (2006 al 2010), incluso se desempeñó como capitán en su mejor momento. En julio del último año que vistió la camiseta del ‘Fla’ fue detenido y en el 2013 condenado por el secuestro, asesinato y por ocultar el cuerpo de su novia, la modelo Eliza Samúdio.
Hoy, el guardameta de 34 años, se ve beneficiado por una decisión judicial tomada el mes anterior que le permite regresar nuevamente al régimen semiabierto tras el homicidio de su expareja. Esto le podría dar luz verde para que vuelva a una cancha de fútbol. Poços de Caldas FC es el equipo interesado en contar con su experiencia, el club compite en las categorías regionales del estado de Minas Gerais.
Su fichaje va tomando mayor peso luego de que Paulo César da Silva, presidente del equipo brasileño confesara a Globoesporte que Bruno Fernandes era el nuevo jale del equipo. Eso sí, el exarquero del Flamengo aún no ha firmado contrato y a pesar del anuncio del directo, el golero necesita una autorización de la Justicia para poder transferirse a la localidad del Poços de Caldas
“Probablemente, la semana que viene empiece a entrenar. Solo necesita algunas autorizaciones, algunas cosas que necesitan ser vistas, pero ya es contratado del club”, indicó el directivo.
Bruno Fernandes y el asesinato que conmocionó Brasil
El guardameta brasileño fue acusado de ser el principal responsable de la desaparición y muerte de su novia Eliza Samúdio en el 2010. La mujer, que en ese entonces tenía 25 años, le reclamaba constantemente al futbolista el pago de una pensión para que hijo que tuvieron ambos.
Un testigo y autor del crimen terminó confesando el cruel acto de Bruno Fernandes. Según las informaciones de este homicidio el arquero pidió deshacerse del cuerpo de la modelo, la descuartizaron y el resto se lo dieron a unos perros.
Tras ser condenado en 2013, el futbolista llegó a ser absuelto por una decisión cautelar del Tribunal Supremo de Brasil. Cuatro años más tarde volvió a jugar en el Boa Esporte.
La medida fue anulada en el 2017 y Bruno se terminó entregándose para ser puesto tras las rejas.
