¿Cómo limpiar una olla quemada de forma sencilla y sin dañarla?
Si tu olla ha quedado con grandes manchas y masas de carbón, AQUÍ te indicamos los mejores trucos para lavarla sin maltratarla ni gastar de más.
¿Cómo limpiar una olla quemada? Es la pregunta que muchos no dejan de hacerse cuando este preciado elemento queda con grandes manchas y costras luego de un accidente con las hornillas, de una receta que no salió bien o simplemente por el uso prolongado. Por ello, aquí te damos una serie de pasos, opciones y consejos para dejarla como nueva.
Si bien limpiar una olla de quemaduras es algo que requiere una buena dosis de esfuerzo, puede realizarse con insumos bastante sencillos de conseguir. Por otro lado, deberás escoger cuidadosamente las técnicas y materiales a emplear según las características de tu olla, porque no querrás rallarla ni que le pase otra cosa.
En ese sentido, hay algunos casos en los que ya no es posible hacer reparo alguno. Nos referimos a las ollas o sartenes de fierro enlozado que perdieron su cubierta, o las sartenes que quedaron sin su capa de teflón o material antiadherente, tal como menciona Buenazo! Si ese es tu caso, deberás pensar en comprar un utensilio nuevo. De lo contrario, sigue estos pasos:
Remoja la olla en agua caliente
Antes de limpiar la olla quemada, recomendamos remojarla en agua caliente y agregar algo de lavavajillas o jabón. Así, podrás hacer que las quemaduras más pequeñas se empiecen a despegar con el paso de los minutos y que la costra se ablande. Puedes obtener mejores resultados si la dejas remojar de un día para otro.
Elige las esponjas adecuadas
Para el lavado, necesitarás lavavajillas y cepillo, pero también una esponja. El tipo de esta última dependerá del material de tu olla: si es de material antiadherente, debes emplear una suave, como las azules; pero si es de acero, cobre o fierro fundido, requerirás una de metal. Las de fibra o verdes serán suficientes en el resto de los casos.
Cómo limpiar una olla quemada con esponja y lavavajilla
Una vez has completado los dos pasos anteriores, retira primero la masa de carbón que quedó húmeda con una esponja o escobilla y la presión de agua caliente del fregadero; otra opción es calentar la olla o la sartén en la hornilla. Si el recipiente es de material antiadherente, lo mejor será usar una espátula de plástico.
Es posible que todavía quede material quemado pese a los esfuerzos descritos. Para esos casos, puedes seguir alguno de los trucos que te mencionaremos a continuación, todos ellos muy simples y efectivos.
Cómo limpiar una olla quemada con bicarbonato
Una opción interesante es limpiar la olla quemada con el bicarbonato de sodio, un compuesto fácil de conseguir en farmacias y ferreterías. Cubre la zona quemada con agua caliente, agrega dos cucharadas del compuesto y deja reposar por 15 minutos. Luego, limpia la masa quemada con un cepillo o un estropajo suave.
Si esto no funciona, vuelve a cubrir la parte problemática con agua y bicarbonato y lleva la olla a la hornilla encendida. Una vez que el líquido empiece a hervir, retira y deja enfriar. Luego, limpia nuevamente el recipiente. Ten cuidado: el bicarbonato no es recomendado para limpiar ollas de aluminio.
Cómo limpiar una olla quemada con sal
Las propiedades antibacterianas de la sal la hacen otra candidata para retirar la suciedad y quemaduras de las ollas. En este caso, deberás llenar entre media y una taza de sal en el fondo de tu olla, dependiendo de su tamaño. Luego, vierte el doble de agua y deja reposar toda la noche.
Si no hay cambios, vuelve a llenar la olla con agua y sal, pero esta vez llévala a hervir, deja que se enfríe y limpia con un estropajo o cepillo.
Cómo limpiar una olla quemada con vinagre
El vinagre blanco ha probado ser efectivo para la limpieza de platos de todo tipo, por lo que si se puede usar con ollas de aluminio. En este caso, no necesitarás frotar: solo aplica sobre la zona afectada y deja hervir por cinco minutos. Al final, deberás lavar con agua y detergente para sacar el olor a vinagre, tal como explica el Diario Vasco.
Existe otra técnica muy útil con el vinagre y el bicarbonato. Combina ambos productos hasta hacer una pasta, la cual deberás untar en los lugares quemados y dejar actuar por 20 o 30 minutos. Seguidamente, restrega un estropajo o esponja empapado en más vinagre. Si no funciona, sigue intentando hasta conseguirlo.
Esta última opción también es muy buena para lavar las manchas de quemadura en la base de la olla o en el mango de la sartén.
Cómo limpiar una olla quemada con jugo de limón
En última instancia, si nada de lo anterior ha funcionado, intenta echar en la olla algo de agua caliente con jugo o zumo de limón. El ácido cítrico de esta fruta quemará los residuos. Una vez haya enfriado, debería ser más fácil limpiar las manchas que quedan.
¿Cómo limpiar una olla quemada de acero inoxidable?
Una de las mejores opciones para limpiar el quemado de una olla de acero inoxidable es la mezcla mencionada de bicarbonato de sodio con vinagre. Para realizarla y aplicarla, debes hacer lo siguiente:
- Disuelve el bicarbonato de sodio en un bol con vinagre e integra ambas sustancias hasta conseguir una pasta.
- Unta la mezcla en las zonas quemadas de la base y las paredes.
- Deja reposar entre 20 a 30 minutos.
- Empapa una esponja en vinagre y frota con ella las zonas untadas. Si las manchas no desaparecen, usa una esponja de metal.
- Si las quemaduras aún no desaparecen, repite el proceso tantas veces como sea necesario.
¿Cómo limpiar una olla quemada de teflón?
Es importante tener cuidado con las ollas de teflón, debido a que su superficie es más delicada y perderá su capacidad antiadherente si se ralla o maltrata. Por ello, una buena opción para empezar puede ser enjuagar la olla con agua caliente y repasar suavemente con una espátula de teflón.
Después, hierve agua a fuego suave entre dos a tres minutos para despegar los residuos sueltos y los que aún están pegados. Deja entibiar, pasa una esponja de forma suave y repite la operación si fuera necesario.
- Otra opción para dejar la olla limpia de quemaduras es echar jugo de uno o dos limones sobre las zonas afectadas, dejar reposar en la noche y enjuagar a la mañana siguiente con agua caliente y una esponja suave.
- Si esto no funciona, prueba con detergente de cocina: en la olla, vierte agua de caño con unas gotas de jabón de vajilla, intégralos sin batir y deja hervir por entre 2 a 3 minutos. Deja entibiar, enjuaga con una esponja suave y repite tantas veces como sea necesario, esta vez con unas gotas de lejía o cloro en el agua.
- En caso que la olla de teflón necesite aún más limpieza, hierve vinagre blanco y, de haber muchas quemaduras, agrega un poco de sal gruesa para erosionar suavemente la superficie al hervir. El propósito en este caso es ir de los métodos más suaves a los más agresivos, pero siempre cuidando la superficie antiadherente.