Gran incendio afecta a la agencia espacial de Japón durante la prueba de un cohete
Una explosión durante la prueba del cohete Epsilon S desencadenó un incendio en la agencia espacial japonesa JAXA. El accidente afecta al programa de lanzamientos y genera un fuerte impacto financiero.
Una prueba técnica en la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) terminó en desastre, el martes 26 de noviembre. En el Centro Espacial Tanegashima, en el sur del país, un fallo en el motor del cohete Epsilon S provocó una explosión que desató un incendio de gran magnitud. Según medios locales, no se reportaron heridos, pero las llamas y columnas de humo alarmaron a los presentes. Este revés pone en peligro los planes de Japón de liderar en el mercado de lanzamientos espaciales con cohetes pequeños y económicos, diseñados para transportar satélites y sondas.
El Epsilon S es parte de una familia de cohetes de combustible sólido que JAXA desarrolló para abaratar los costos del acceso al espacio. Diseñado para realizar hasta ocho lanzamientos anuales, el modelo representa un esfuerzo clave de Japón para competir con actores como SpaceX y Rocket Lab en el mercado internacional. Sin embargo, el reciente accidente, el segundo en dos años, expone desafíos para el desarrollo del programa Epsilon, lo que afecta tanto la confianza en la tecnología como la agenda de lanzamientos prevista.
¿Cómo se originó el incendio?
El incendio tuvo lugar durante una prueba de combustión del cohete Epsilon S, un proceso clave para evaluar la funcionalidad del motor en condiciones controladas. Según la agencia espacial japonesa, la explosión ocurrió apenas 49 segundos después de iniciado el ensayo. Aunque todavía no se determina la causa exacta, los primeros informes indican una posible anomalía en el motor, que podría haber encendido el combustible sólido. Imágenes transmitidas por la televisión nacional mostraron bolas de fuego y humo denso emanando del sitio de pruebas.
Los testigos presenciales, ubicados a casi un kilómetro del lugar, describieron la explosión como estremecedora. En un comunicado, JAXA señaló que se encuentra investigando a fondo lo sucedido y aseguró que revisará los procedimientos para evitar futuros fallos. Este no es el primer incidente relacionado con el Epsilon S; en 2023, una prueba en el norte de Japón resultó en otra explosión debido al sobrecalentamiento de componentes, lo que puso en evidencia problemas en el diseño del sistema térmico del motor.
Retrasos en el programa de lanzamientos
El impacto del accidente va más allá del daño físico a las instalaciones de JAXA. La agencia tenía planes de realizar varios lanzamientos con el Epsilon S antes de marzo de 2025, incluidos proyectos internacionales como el transporte de un satélite de observación terrestre para Vietnam. Ahora, la posibilidad de cumplir con estas metas parece remota. Además, el mercado financiero reaccionó negativamente al incidente, con una caída del 7% en las acciones de IHI Corporation, la empresa asociada que colabora en el desarrollo de estos cohetes.
La situación también afecta la reputación de Japón en el sector espacial. El país, que recientemente logró el alunizaje de una misión no tripulada y aspira a competir directamente con SpaceX, enfrenta desafíos considerables para recuperar la confianza internacional en su tecnología. A nivel local, la agencia debe ahora demostrar que puede superar estas dificultades y garantizar la seguridad en sus lanzamientos.
El programa Epsilon comenzó en 2013 con el lanzamiento de su primer cohete desde el Centro Espacial Uchinoura, marcando un hito en la estrategia de Japón para reducir los costos del acceso al espacio. Sin embargo, este incidente subraya los riesgos asociados con los programas espaciales, donde incluso los pequeños errores pueden tener grandes consecuencias. Para JAXA, la prioridad será identificar las fallas en el diseño del cohete y recuperar su posición en el competitivo mercado espacial.