Atafona, un balneario apacible al norte de Rio de Janeiro, sufre una erosión crónica agudizada por el calentamiento, mismo que transformó el lugar en un paisaje apocalíptico. Debido a una combinación de factores naturales y humanos, el mar avanza hasta seis metros por año y ya ha sumergido más de 500 casas en una franja de 2 km. en Brasil. VIDEO: AFP