Perú se ha consolidado como uno de los destinos más apreciados por numerosos extranjeros, ya sea por la riqueza de sus danzas, la hospitalidad de su gente, su exquisita gastronomía o sus impresionantes paisajes históricos. Un turista proveniente de México fue uno de los viajeros que quedó maravillado al llegar a Machu Picchu, en la región del Cusco, sin embargo, un pequeño incidente provocó cierta confusión en su experiencia. Esta anécdota pronto se volvió viral en las plataformas de redes sociales.
Un turista originario de México comentó en su video, @soyelarturito que decidió llegar a Perú con la emocionante misión de visitar Machu Picchu, el emblemático lugar reconocido a nivel mundial.
El extranjero no se arrepintió de su adquisición a pesar de que los visitantes no usan este tipo de prendas en Machu Picchu. Foto: composición LR/TikTok/@soyelarturito
Para ello, investigó todo lo relacionado con las costumbres en territorio peruano, y se animó a comprarse un poncho con el dibujo de una llama. Según mencionó el extranjero, le habían dicho que, en la histórica montaña, los visitantes usaban la típica prenda de vestir, por lo que no dudó en adquirir uno.
“Me dijeron que en Machu Picchu todos venían con su poncho. Soy el único en todo el cerro que lo trae. Nadie lo usa. Me compré este poncho para la foto, pero no me arrepiento”, se le oyó decir al joven turista muy entusiasmado con su nueva adquisición.
“Soy el único con poncho, pero está épico”, manifestó el muchacho, que se mostraba contento de haber llegado a la cima de la montaña y deleitarse con tan maravilloso paisaje.
Durante su recorrido, se encontró con algunas llamas que comían pasto, escena que también sorprendió al joven visitante.
“Está bien bonito. Aquí tenemos a los jardineros de Machu Picchu, las llamas incas”, continuó diciendo en el clip que ha generado una ola de comentarios en la popular red social china.
Como era de esperarse, los usuarios en las redes sociales brindaron sus comentarios.
“Las fotos con poncho en Machu Picchu quedan épicas”, “Se refieren al poncho de plástico porque a veces llueve”, “Ese poncho está de lujo”, “No pierdas la oportunidad de hacer el audio de las locuras del emperador”, “Cuestan bastante, por eso no lo tienen, pero tus fotos quedarán espectaculares”, fueron solo algunos mensajes que compartieron los usuarios en las redes sociales.
Un abrigo hecho de una sola pieza rectangular de tela gruesa, con un corte en el centro para introducir la cabeza, es lo que caracteriza al poncho. Este sencillo diseño lo convierte en una vestimenta icónica de Perú, considerada parte del patrimonio cultural del país y símbolo de su tradición.
El 7 de julio de 2007, Machu Picchu fue elegido como una de las siete nuevas maravillas del mundo moderno. Foto: Andina
Durante el año, Machu Picchu vive diferentes etapas en cuanto a la afluencia de turistas. La temporada baja, que coincide con la estación lluviosa, ocurre entre noviembre y marzo. Durante este periodo, las visitas a la Ciudad Inca disminuyen considerablemente, ya que muchos turistas prefieren evitar las lluvias típicas de esos meses.
Una artesana dedicada a la confección de prendas invierte entre uno y cuatro meses en completar su labor, inmersa en un proceso que se inicia mucho antes, con la recolección de la fibra de animales como la llama, la alpaca, la oveja, el guanaco o la vicuña. Este minucioso trabajo requiere de paciencia, destreza y un profundo conocimiento de las técnicas tradicionales de tejido, que han sido transmitidas de generación en generación. La artesanía textil es un arte ancestral que refleja la riqueza cultural y la dedicación de las comunidades andinas en la creación de piezas únicas y llenas de historia.
Los ponchos peruanos, parte de la vestimenta tradicional, son usados por hombres y mujeres. Están confeccionados con lana de vicuña, alpaca o llama, y presentan estampados coloridos y detalles intrincados. Además, ofrecen abrigo adicional en el gélido clima montañoso de Perú.
Durante las mañanas, a partir de las 10:00 hrs, la majestuosa ciudadela de Machu Picchu recibe al 80% de sus visitantes. Esta concentración de turistas en las primeras horas del día crea una atmósfera bulliciosa y llena de energía. Sin embargo, conforme avanza la jornada, es probable que en el horario de la tarde puedas disfrutar de una experiencia más tranquila y apacible, con menos tráfico de visitantes que te permitirá explorar y maravillarte con la belleza de este increíble lugar de manera más divertida.
Según cifras del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), la afluencia al Santuario Histórico de Machu Picchu en el primer trimestre de 2024 fue de 120,780 visitantes. Esto representa un incremento del 70% en comparación con el mismo periodo de 2023, pero una disminución del 60.8% en relación con el año 2019.