En Puno, sorprendidos terminaron decenas de turistas, que intentaron abordar embarcaciones de madera en busca de llegar a las islas del lago Titicaca, cuando repentinamente un oleaje anómalo lo cubrió todo de agua. El fenómeno se habría registrado a consecuencia de las ráfagas de vientos que se desplazaban a 60 y 80 kilómetros por hora en todo el altiplano puneño.
Los primeros reportes señalan que solo en el caso del puerto de la isla de Taquile, en la provincia de Puno, decenas de turistas se vieron impedidos de retornar debido a que sus embarcaciones, inundadas de agua, no pudieron zarpar hacia el puerto de Puno. Y es que las olas alcanzaron un metro de altura. El panorama se repite en otros puertos del lago.
Los cambios climatológicos, de acuerdo al Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), obedecen a que se adelantó el periodo de vientos en el altiplano, debido -aparentemente- a factores atmosféricas de alta y baja presión.
Sin embargo, los vientos atípicos con capacidad de generar torbellinos también se registraron en varias provincias de Puno. En distintos puntos de la ciudad puneña varias viviendas terminaron destechadas. En la isla de los Uros catorce viviendas construidas a bases de totora fueron arrasadas y en varias comunidades viviendas techadas con paja, tejas y calaminas plásticas, terminaron completamente descubiertas.
Dadas las circunstancias, el Centro de Operaciones de Emergencia (Coer) del Gobierno Regional de Puno informó que enviará ayuda a las zonas más afectadas siempre y cuando la situación lo amerite.