Declaración. Avelino Guillén, quien fue titular del Interior de Pedro Castillo y renunció por los cambios hechos en los altos mandos de la Policía Nacional del Perú (PNP), se expresó sobre el cuestionado Gobierno que lo sucedió, el de Dina Boluarte. Según dijo, se ha “llegado a esta situación tan dramática y trágica, básicamente por responsabilidad del Poder Ejecutivo”. El también ex fiscal supremo argumentó su parecer con el contenido de las actas del consejo de ministros publicados por El Foco, donde se expuso la calificación a las “protestas legítimas” como “accionar terrorista”.
Guillén comentó en “No hay derecho” que estigmatizar fue “el punto más grave y lo que dio lugar al accionar excesivo (…) de las fuerzas del orden”. La declaratoria de estado de excepción en ciudades sureñas provocó que “la violencia escalara”. Para él no hubo duda: “Tengo claro que la responsabilidad (…) es del poder Ejecutivo por su absoluta incompetencia para calificar y no entender la protesta ciudadana como un hecho de cuestionamiento que está realizando vastos sectores de la población”.
La situación le pareció todavía más incongruente porque el Ejecutivo tildó de terrorista “a quienes, durante la insania y el accionar criminal de los 80, pusieron el pecho y lucharon contra el terrorismo a través de las rondas campesinas”.
Colegas durante parte de la gestión del exmaestro de escuela rural, Guillén se siente extrañado por la actitud de Dina Boluarte. Se preguntó: “¿Qué puede haber ocurrido para que una persona que, en los primeros Consejos Descentralizados, fue a cantar y celebraba? Pienso que la señora Boluarte ya llegó al poder y tiene una posición constitucional respaldada, pero rápidamente pierde legitimidad por su accionar y por la situación de estado de emergencia que planteó casi de inmediato”.
Guillén sospecha que incluso antes de ponerse el fajín, “ella ya ha estado en conversaciones con sectores de la ultraderecha” porque “quienes perdieron las elecciones en 2021 son los que ahora están gobernando”. Boluarte es “solamente el rostro, la imagen que necesitan que hay una sucesión constitucional”.