Una línea de tiempo sobre el desempeño del Congreso evidencia cómo en esta institución se intentó, sin éxito, posponer la fecha de convocatoria de las elecciones generales del 2021 (ver infografía).
El 16 de marzo, trascendió que en Acción Popular (AP) había un borrador de iniciativa de ley para aplazar el inicio del proceso electoral. Ese día, Fernando Tuesta, presidente de la Comisión de Reforma Política, denunció dicha maniobra desde Twitter.
Al final, el congresista Luis Roel (AP) planteó un proyecto que mantenía la fecha de convocatoria a los comicios generales.
Sin embargo, al mes siguiente, el vocero alterno del partido de la lampa, Ricardo Burga, declaró que producto de la pandemia lo ideal era postergar las elecciones.
El 6 de julio, sumándose a este coro, Omar Chehade, congresista de Alianza para el Progreso (APP) y presidente de la Comisión de Constitución, presentó un predictamen para que los comicios se convoquen 120 días antes del sufragio, es decir, en enero del 2021, y que la primera vuelta electoral sea en mayo de ese año.
Dos días después, mientras Constitución discutía la iniciativa, el presidente Martín Vizcarra se adelantó al Legislativo y convocó a elecciones presidenciales y congresales.
A partir de ese hecho, la relación entre Ejecutivo y Legislativo se volvió tensa: el 1 de agosto, el Congreso aprobó interpelar al ministro de Educación, Martín Benavides. Tres días después le negaron el voto de confianza al gabinete del entonces premier Pedro Cateriano. El 24 de ese mes aprobaron interpelar a la ministra de Economía, María Antonieta Alva.
Y el 9 de setiembre, los aliados de Unión por el Perú (UPP) y Podemos Perú promovieron la censura, sin éxito, de Alva. Al día siguiente, ambas agrupaciones presentaron la primera moción de vacancia contra el presidente Vizcarra, que diez días después se truncó por falta de votos.
El 8 de octubre, el pleno del Congreso, no obstante, aprobó ampliar por 30 días la investigación de Edgar Alarcón, congresista de UPP y presidente de la Comisión de Fiscalización, contra el jefe del Estado por el caso Richard Swing. Pese a que tiene tres acusaciones constitucionales, Alarcón continúa en Fiscalización. Manuel Merino, titular del Parlamento, ni convoca a la Comisión Permanente para que evalúen tales acusaciones.
El 19 de octubre, otra vez, UPP y Podemos, interpusieron otra moción de vacancia contra el mandatario.
Vizcarra dice que todo esto apunta a que algunas bancadas quieren patear el tablero de la democracia. Los hechos hablan por sí solos.
Por otro lado, para el 3 de noviembre, como anunció Chehade, habrá listo un predictamen en Constitución a favor de volver a la bicameralidad. En el 2018, la posibilidad de ser elegidos senadores fue una opción para varios legisladores. El referéndum promovido por Vizcarra les negó la posibilidad.
Mirtha Vásquez, congresista del Frente Amplio, considera que hay premura en la comisión de Chehade. “De manera justificada podría surgir la suspicacia de que se propone una reforma así para que los congresistas tengan una posibilidad como senadores”, expresó. Sería la ecuación perfecta para los congresistas en caso la contienda electoral del próximo año se posponga.
Mientras estos acontecimientos toman forma, la vacancia continúa su proceso. La Junta de Portavoces acordó ayer que la primera semana de noviembre se discutirá la admisión a trámite de la vacancia. El Congreso necesita 52 votos para ello. APP, AP, Frepap y Fuerza Popular aún no fijan su posición. De ellos dependerá el desenlace.
El magistrado del Tribunal Constitucional (TC) Eloy Espinosa-Saldaña declaró a La República que el Legislativo debe evaluar si es conveniente vacar a un mandatario en estas circunstancias a pocos meses de las elecciones.
“¿Cuál es el efecto de esta vacancia? Que si se concede, estamos en octubre yendo a noviembre, tendríamos a alguien que asuma la presidencia entre noviembre y julio. ¿Vale la pena eso o no?”, cuestionó.
El expresidente del TC Óscar Urviola exhorta a los parlamentarios a actuar con objetividad.
Sin embargo, en las bancadas aliadas en esta embestida política, parece que no escuchan recomendaciones.
Óscar Urviola, expresidente del Tribunal Constitucional
“Se debe actuar con objetividad y sin apasionamientos. Es decir, con prudencia. El ejercicio de la función parlamentaria tiene que ser responsable de las consecuencias”.
Quinquenio difícil. En menos de cinco años, se han discutido cuatro procesos de vacancia presidencial. Dos contra Pedro Pablo Kuczynski y ahora dos contra Martín Vizcarra. La figura constitucional de la incapacidad moral está trastocada.
Suscríbete aquí al boletín Política La República y recibe a diario en tu correo electrónico las noticias más destacadas de los temas que marcan la agenda nacional.