La detención de Ismael "El Mayo" Zambada García, líder del Cártel de Sinaloa, ha provocado un intenso análisis sobre su impacto en el mundo del narcotráfico. A lo largo de cuarenta años, Zambada logró evadir la captura, consolidando su control sobre el tráfico de drogas en México y expandiendo sus operaciones a nivel global. Según Mike Vigil, exjefe de Operaciones Internacionales de la DEA, el poder y la influencia de Zambada superan con creces a los de Pablo Escobar y Joaquín "El Chapo" Guzmán, debido a su capacidad para manejar una organización criminal compleja sin atraer la atención que otros líderes del narcotráfico recibieron.
A diferencia de Escobar, quien se centró exclusivamente en el tráfico de cocaína, el Mayo Zambada diversificó sus actividades delictivas, involucrándose en la distribución de múltiples sustancias, el tráfico de migrantes y hasta el robo de petróleo. Esto, sumado a su capacidad para mantenerse oculto durante décadas, lo convierte en un líder sin precedentes en la historia del narcotráfico.
En entrevista con Infobae, Mike Vigil, exagente de la DEA, ha sido contundente al afirmar que comparar a Ismael "El Mayo" Zambada con Pablo Escobar es como enfrentar a un veterano boxeador con un novato. Mientras que Escobar se enfocó exclusivamente en el tráfico de cocaína, Zambada dirigió una red global que incluía el tráfico de cocaína, heroína, metanfetaminas, marihuana y fentanilo.
Además, el Cártel de Sinaloa bajo la dirección de Zambada no se limitó a una sola región. Operó en seis de los siete continentes, ampliando sus actividades más allá del narcotráfico tradicional. Entre sus operaciones ilegales se encuentran el tráfico de migrantes, el robo de petróleo y la infiltración en industrias como la del aguacate y la pesca, lo que le permitió generar millones de dólares adicionales.
Aún se desconoce el impacto que generará en el narcotráfico la detención de Zambada. Foto: El País
El poder de Zambada también se destaca por su habilidad para mantener un perfil bajo y evitar la persecución de las autoridades durante décadas. A diferencia de Escobar, que fue abatido en 1993 tras una intensa cacería, y Guzmán, que fue capturado y extraditado, Zambada logró escapar de las fuerzas del orden, manteniendo su liderazgo a lo largo de los años.
Ismael "El Mayo" Zambada enfrenta múltiples cargos en cortes federales de Estados Unidos, donde se le acusa de supervisar el tráfico de enormes cantidades de drogas hacia este país. Entre las sustancias traficadas se encuentran cocaína, heroína, metanfetaminas, marihuana y fentanilo, consolidándose como una de las principales amenazas para la salud pública en América del Norte.
Además de los cargos relacionados con el tráfico de drogas, se le atribuyen otros delitos graves, como el lavado de dinero y la participación en actividades criminales en varias industrias mexicanas. Investigaciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos han revelado que el Cártel de Sinaloa, bajo su mando, utilizó empresas legítimas para lavar dinero, incluyendo negocios que obtuvieron contratos gubernamentales en México.
La recompensa ofrecida por el gobierno estadounidense por información que condujera a su captura ascendía a 15 millones de dólares, reflejando la magnitud de su influencia y peligrosidad. A pesar de su detención, las autoridades mexicanas aún no han confirmado si buscarán su extradición a Estados Unidos.
El Mayo Zambada fue captura en Estados Unidos. Foto: La Tercera
La captura de Ismael "El Mayo" Zambada se produjo tras años de seguimiento y reducción de su círculo cercano. A lo largo de la última década, las autoridades lograron arrestar a su hermano, a dos de sus hijos y a un sobrino, debilitando significativamente su red operativa. Estas capturas, que incluyeron a figuras clave como Jesús "El Rey" Zambada y Vicente Zambada Niebla, alias "El Vincentillo", resultaron en testimonios que ayudaron en el juicio contra Joaquín "El Chapo" Guzmán en Nueva York en 2019.
A pesar de estos golpes, Zambada logró mantenerse oculto y en control de sus operaciones. Su captura fue un golpe inesperado para muchos, considerando su habilidad para evadir a las fuerzas del orden durante tanto tiempo. Ahora, con su detención, surge la pregunta sobre quién tomará el liderazgo del Cártel de Sinaloa. Las especulaciones apuntan a su hijo, Ismael Zambada Sicairos, alias "El Mayito Flaco", quien podría ser el sucesor natural para continuar con la organización.