El Parlamento de Cataluña aprobó modificar su ley contra la violencia machista, en la que se incluyó a todas las mujeres trans que se identifiquen como tales sin la necesidad de contar con documentos que certifiquen un tratamiento hormonal o un informe de disforia de género, tal como exponía la ley de 2008.
“Las mujeres transgénero que no tienen la mención de sexo registrada como mujer en la documentación oficial se equiparan, a los efectos de esta ley, a las otras mujeres que han sufrido violencia machista en la medida en que se reconocen como mujeres”, se detalla en el texto aprobado.
Susanna Segovia, portavoz parlamentaria de Catalunya En Comú Podem, explicó que la inclusión de las mujeres trans como posibles víctimas de la violencia machista no perjudica a las féminas.
“Las mujeres trans sufren violencia machista porque son mujeres, porque hay relaciones de poder de género que les afectan como mujeres”, añadió Segovia.
Por su parte, la parlamentaria Jenn Díaz también celebró que se haya normalizado a las personas trans y se garantice sus derechos. “(La ley) quiere amplificar el derecho de todas”, sostuvo.
Con la modificación de la norma, las mujeres trans víctimas de violencia machista podrán ser atendidas en las oficinas que resguardan estos casos.
La ley aprobada también incluye una modificatoria para que los partidos políticos tengan un plan interno de igualdad y un protocolo para la prevención, detección y actuación ante la violencia machista que ejerzan sus afiliados o simpatizantes, dentro o fuera de la organización.
Asimismo, se considera a la violencia machista en el ámbito digital e institucional: desde el control del teléfono móvil de la pareja hasta la revictimización de las mujeres que han sufrido estos ataques.