El estado de Texas enfrenta una de las tormentas invernales más severas de los últimos años, con temperaturas que caerán por debajo del punto de congelación en gran parte de su territorio. El gobernador Greg Abbott anunció la activación de recursos estatales de emergencia para garantizar la seguridad de los ciudadanos ante el impacto del clima extremo.
Asimismo, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) advirtió que esta semana se esperan nevadas, hielo y lluvia helada, lo que podría ocasionar cortes de energía, interrupciones en el tráfico y un aumento en los riesgos para los automovilistas. Las autoridades han hecho un llamado urgente a la población para que permanezca informada, evite viajes innecesarios y utilice los centros de calentamiento disponibles en diversas regiones del estado.
Ante el pronóstico del tiempo que alerta sobre una megatormenta de nieve, Texas ha desplegado un plan integral de emergencia para enfrentar los desafíos del clima extremo. Estas son las principales acciones anunciadas por el gobernador Abbott:
Además, se activaron equipos médicos especializados para brindar atención de emergencia en zonas críticas y personal capacitado para evaluar y recuperar áreas afectadas por posibles cortes de energía y suministro de gas natural. Las autoridades locales recomendaron a los residentes mantenerse atentos a los avisos oficiales y localizar el centro de calentamiento más cercano en tdem.texas.gov/warm.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido alertas para gran parte de Texas, señalando que las temperaturas descenderán drásticamente durante esta semana. Se espera nieve acumulada en regiones del norte y centro del estado, acompañada de hielo y lluvia helada en las áreas más al sur.
Las condiciones climáticas adversas dificultarán los desplazamientos, especialmente en las autopistas y caminos rurales, donde el tratamiento previo podría no ser suficiente para evitar el congelamiento de la superficie.
El Servicio Meteorológico Nacional pronostica que la tormenta invernal seguirá hasta el viernes. Foto: NWS/ X
La tormenta invernal de febrero de 2021 es recordada como una de las nevadas más devastadoras en la historia reciente de Texas. Durante aquel evento climático, más de 200 personas perdieron la vida y millones de residentes quedaron sin electricidad ni agua potable debido al colapso de la infraestructura energética del estado.
Las temperaturas descendieron hasta los -19°C en algunas regiones, y el sistema eléctrico colapsó debido a la falta de preparación para un clima tan extremo. Esta crisis generó críticas al sistema de suministro energético estatal y provocó reformas en los protocolos de emergencia para evitar situaciones similares en el futuro.