La denuncia pública que hizo Angye Zapata en contra de su expareja Martín Távara por agresión física y psicológica tuvo como primera consecuencia la separación del jugador del plantel de Sporting Cristal. Tras ello, la empresa que representa al jugador, Agref, informó que dispuso ayuda profesional para ambas partes a fin de “abordar el tema de raíz y de forma integral”.
“Pusimos a disposición de las partes apoyo legal y psicológico, con el objetivo de abordar el tema de raíz y de forma integral. Dicho apoyo fue aceptado por Martín y este viene siendo sostenido hasta el momento”, señaló la agencia a través de un comunicado, en el cual manifestó su rechazo a la violencia.
Agref indicó que, de acuerdo a las recomendaciones de los expertos, el proceso se llevará a cabo de forma privada, sin pronunciamientos ni descargos por parte de Távara: “Se ha decidido (...) optar porque este proceso se siga llevando a cabo de forma privada, sin exponer más detalles que puedan impactar de forma negativa la reputación y estabilidad emocional de ambas partes”.
Comunicado acerca del caso Martín Távara. Foto: Agref
Zapata, a quien también le fue ofrecido apoyo del Ministerio de la Mujer, contó el último lunes 24 de octubre en el programa “Magaly TV, la firme” que su expareja tenía problemas de ludopatía y alcoholismo, por lo cual había hablado con su entorno para que este le brinde la ayuda pertinente.
El martes 25, el club rimense informó de forma oficial la separación del jugador luego de que inicialmente notificara la apertura de un procedimiento de acuerdo a su política interna.
“Luego de la correspondiente evaluación de los hechos en base a la información obtenida hasta el momento, el Club Sporting Cristal ha decidido proceder con la separación del futbolista del equipo profesional de fútbol masculino, suspendiendo de manera integral toda actividad profesional del deportista”, comunicó el cuadro celeste.
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Si eres víctima de violencia o conoces a alguien que ha sido afectada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate gratuitamente a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables para recibir “información, orientación y soporte emocional”.
Asimismo, la Línea 100 está facultada de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer (CEM) o al Servicio de Atención Urgente (SAU), el cual funciona las 24 horas del día, todos los días del año.