Alianza Lima perdió 2-1 con Sport Huancayo y cortó su racha de cuatro triunfos consecutivos en Liga 1. Si bien el Rojo Matador tuvo más ocasiones de gol y fue superior en gran parte del encuentro de igual manera, el hincha blanquiazul quedó disconforme en particular con la jugada del tanto de Ronal Huaccha, el cual terminó siendo el que determinó la derrota. Franco Saravia, el arquero de Alianza, ha sido señalado como el gran responsable de la acción.
Como se puede ver en la repetición, Franco Saravia despeja en primera ante la presión de Ronal Huaccha, y el rebote en el delantero de Sport Huancayo lo favorece para marcar el 2-1 con total libertad. Esto llevó a que las críticas cayeran encima del joven portero, pero una revisión más 'holística' de la jugada nos permite dar cuenta de que, en realidad, hay más detalles a tomar en consideración para revisar.
El problema del gol de Ronal Huaccha comienza con la decisión de Pablo Míguez en darle pase a Saravia pese a que tenía tiempo para él mismo controlar y perfilarse hacia afuera para salir o lanzar el balón. Luis Benites se encontraba lo suficientemente lejos, por lo que el uruguayo podía parar el balón sin correr demasiados riesgos. Sin embargo, Míguez tuvo la intención de tocar en primera desde que García soltó la pelota.
Nótese el tiempo y espacio que tenía Pablo Míguez cuando recibe el balón. En la repetición se observa que Benites no presiona con velocidad, e incluso voltea a mirar sus espaldas mientras se acerca al uruguayo. Foto: captura de Liga 1 MAX
En la salida, siempre resulta más seguro jugarla hacia los costados que hacia el medio, especialmente si hay jugadores rivales presionando. Esto aplica muy bien para la jugada del segundo gol de Sport Huancayo, ya que el pase de Pablo Míguez resultó comprometedor para Franco Saravia, debido a que Ronal Huaccha estaba en posición para picar de frente e intentar quitar el balón.
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Pese a lo mencionado en el párrafo anterior, lo que pesó más que la decisión de darle el pase a Saravia fue el cómo Míguez toca el balón. Si ya había decidido de antemano jugar con su arquero, la elección de hacerlo en primera era lo correcto. No obstante, el problema estuvo en la fuerza y la dirección con la que salió el balón de los pies del uruguayo.
La pelota quedó algo corta para la distancia en la que se encontraba Saravia de Míguez, y esto le dio ventaja a Huaccha al momento de ir a presionar. Además de esto, el balón va al espacio y no al pie, lo cual obligó a que el arquero vaya a buscarla en diagonal. Es posible que varios se hayan preguntado por qué no la despejó hacia el otro lado, y esto es por la dirección del pase.
Observe cómo tiene que poner el pie Saravia para pegarle, y cómo Huaccha intuye la dirección a la que iría el despeje en función a esto. Foto: captura de Liga 1 MAX
Franco Saravia es diestro, por lo que lo ideal era que el pase de Míguez vaya a su pie y más abierto, de manera que así tenía mejores posibilidades para direccionar un eventual rechazo. Sin embargo, la pelota fue hacia el medio, y por la velocidad era imposible que Saravia llegue, mida y abra el pie derecho para sacarla. La otra era ir con la izquierda, enganchar hacia afuera o amagar el despeje y controlar, pero eran opciones más riesgosas.