Una verdadera batalla se vivió este domingo 6 de febrero en territorio camerunés. Senegal y Egipto se enfrentaron en la gran final de la Copa Africana de Naciones 2022, en un duelo cuyos protagonistas fueron Sadio Mané por un costado y en el otro Mohamed Salah. Juntos han vivido miles de alegrías, pero esta tarde solo uno sonrió.
La gloria de los Leones de la Teranga tenía la difícil tarea de no tropezar nuevamente en esta última instancia del mayor torneo del continente. Dos años antes, fueron ellos quienes cayeron derrumbados sobre el césped y rompieron en llanto al ver que por segunda vez se les escapaba el tan ansiado título.
Sadio Mané es la gran estrella del conjunto tricolor, pero el plantel es considerado mejor del campeonato, ya que todos sus jugadores militan en el fútbol europeo. Figuras como Kalidou Koulibaly del Napoli, Edouard Mendy del Chelsea o Idrissa Gueye del PSG no quisieron perderse esta oportunidad de oro.
El certamen africano estuvo lleno de sorpresas con la temprana eliminación de Argelia, el reciente campeón. Además, las caídas de Nigeria y Costa de Marfil en octavos de final. Burkina Faso y Guinea Ecuatorial irrumpieron en el torneo y dieron más de un batacazo. Sin embargo, ambos se toparon con una imponente Senegal.
En la otra esquina, estaba Egipto, la selección más laureada de la Copa África con siete trofeos, cuyo líder era nada menos que Mohamed Salah, finalista del Balón de Oro en dos ocasiones y el mejor futbolista de la actualidad para muchos. Un equipo que eliminó a dos de los favoritos: Marruecos y Camerún, el anfitrión.
Los Faraones empezaron el duelo con el pie izquierdo, pues Mohamed Abdelmonem derribó en el área a Saliou Ciss y el juez cobró falta. Sadio Mané pidió la pelota y ejecutó el penal, pero el arquero Gabaski atajó su poderoso remate. El guardameta egipcio se convertiría en la figura del cotejo al salvar su portería en varias ocasiones.
Pero como dice el dicho popular, “a la tercera es la vencida”. El entrenador de Senegal, Aliou Cissé, estaba ante su prueba más difícil como técnico y no podía caer otra vez. El exfutbolista estuvo presente en la primera final disputada de su selección en 2002, en la cual perdieron con la Camerún de Samuel Eto’o y también estuvo en el subcampeonato del 2019, pero como técnico.
El enfrentamiento no pasó del cero y se fueron a la tanda de penales tal como hace 20 años. Tanto Mané como Salah decidieron esperar y ambos eran los quintos en patear. El destino quiso que solo uno de ellos ejecutara su penalti y fue el que brilla por la banda izquierda del Liverpool.
‘Sad 10′ fue el villano de su equipo al errar su penal en los primeros minutos, pero el fútbol como tantas veces, te da revanchas. El astro red tuvo la chance de no solo anotar, sino de entregarle el primer título africano de la historia de su país. Y esta vez, no falló. Sacó un derechazo esquinado y por fin pudo vencer a Gabaski.
Mané se redimió y como la estrella mundial que es, apareció cuando tuvo que hacerlo. No solo todo Senegal celebra, los millones de senegaleses que viven al rededor el mundo también están de fiesta. Hoy Sadio se convirtió en leyenda y su nombre estará grabado por siempre en su país como el hombre que les dio la Primera.
Senegal se coronó por primera vez campeón de África. Foto: AFP
Sadio Mané fue elegido el mejor jugador de la Copa Africana y le ganó la partida a Mohamed Salah, que supo liderar a Egipto hasta esta final. No obstante, el fútbol es un deporte colectivo y está repleto de sorpresas y detalles que cambian el resultado. Pero esto no queda acá, ambas selecciones se encontrarán de nuevo en dos duelos a muerte por un cupo al Mundial de Qatar 2022. ¿Habrá revancha?