El Bayern Múnich campeonó la Supercopa de Alemania tras vencer por 3-1 al Borussia Dortmund, con dos goles de Lewandowski y uno de Müller, los bávaros se impusieron a sus rivales que descontaron con un magistral gol de Marco Reus. Fue un partido con diversas emociones, donde uno de los futbolistas tuvo una en particular.
El primer gol del encuentro lo realizó Robert Lewandowski a los 41 minutos; el polaco anotó de cabeza luego de un gran centro de Gnabry. Tras el tanto, el equipo rival sufrió un bajón anímico a finales del primer tiempo.
Pero una reacción llamó la atención de todos los espectadores. Fue Erling Haaland, delantero del Borussia Dortmund quien mostró toda su frustración en la cancha, pues no soportó que el Bayern Munich iniciara con los goles en el Estadio Signal Induna Park.
Suscríbete aquí al boletín Deportes La República y recibe de lunes a viernes en tu correo electrónico todas las novedades del deporte nacional e internacional.