Los escándalos extrafutbolísticos parecen no terminar para Neymar. Esta vez, el astro brasileño, quien se encuentra concentrando con la selección de Brasil para las eliminatorias, se pronunció sobre una acusación de presunto acoso sexual en su contra realizada por una empleada de Nike.
Este hecho se da luego de que la reconocida marca deportiva afirmara en un comunicado que cortó su contrato de auspicio con el brasileño debido a que este se rehusó a colaborar en el caso presentado por una de sus colaboradoras. Por ello, el jugador del PSG indicó que nunca le dieron el derecho a defenderse y que quedó abandonado por uno de sus patrocinadores más antiguos.
“No tuve la oportunidad de defenderme. No se me dio la oportunidad de saber quién era esta persona ofendida. Ni siquiera la conozco. Nunca he tenido una relación. Ni siquiera tuve la oportunidad de hablar, de conocer las verdaderas razones de su dolor. Esa persona, un empleado, no estaba protegida. Yo, un atleta patrocinado, no estaba protegido. ¿Hasta cuándo?”, indicó el 10 de Brasil en su extensa carta en Instagram.
Neymar se pronunció luego que Nike decidiera romper su contrato de patrocinio. Foto: Instagram.
Pero ¿qué pasó? Según el diario The Wall Street Journal, la mencionada empleada de Nike visitó a Neymar cuando este estuvo en Nueva York en 2016 para un evento organizado por la multinacional. La denunciante afirmó que, en dicha habitación del hotel donde se hospedaba, el brasileño la obligó a practicarle sexo oral.
Como era de esperarse, el jugador que debutó en Santos negó el hecho afirmando que ni siquiera conoce a la persona que lo denunció. Cabe señalar que esta no es la primera acusación de abuso sexual que afrontó el exjugador de FC Barcelona, ya que en 2019 fue acusado por una modelo que aseguró haber sido violada por el futbolista.
Los hechos se pueden distorsionar porque la gente los ve desde diferentes ángulos. No podemos negar que la vida es así. ¡Es parte de eso!
Incluso entiendo cuando alguien critica mi conducta, mi forma de jugar y de vivir la vida. ¡Somos diferentes!
Realmente no entiendo cómo una empresa seria puede distorsionar una relación comercial respaldada por documentos. Las palabras escritas no se pueden modificar. Son muy claros. ¡No dejes ninguna duda!
Desde que tenía 13 años, cuando firmé mi primer contrato, siempre me advirtieron: ‘¡No hables de tus contratos! ¡Los contratos son confidenciales!’.
Contrariamente a esta regla, afirmo que mi contrato fue rescindido porque no contribuí de buena fe a una investigación. Esto es absurdo, mentiroso. Una vez más se me advierte que no puedo comentar en público. ¡Indignado obedeceré!
Pero la historia de WSL es muy clara. En 2016 parece que ya sabían de este evento. ¡Yo no sabía! En 2017 viajé de nuevo a USA para una campaña publicitaria, con las mismas personas, no se dijo nada, ¡nada cambió!
En 2017, 2018, 2019 realizamos viajes, campañas, innumerables sesiones de grabación. Y no me dijeron nada. Un asunto de tanta seriedad y no hicieron nada. ¿Quiénes son los verdaderos responsables?
No tuve la oportunidad de defenderme. No se me dio la oportunidad de saber quién era esta persona ofendida. Ni siquiera la conozco. Nunca he tenido una relación. Ni siquiera tuve la oportunidad de hablar, de conocer las verdaderas razones de su dolor. Esa persona, un empleado, no estaba protegida. Yo, un atleta patrocinado, no estaba protegido. ¿Hasta cuándo?
Ironía del destino. Seguiré imprimiendo una marca en mi pecho que me traicionó. ¡Esa es la vida! Me mantengo firme y fuerte, creyendo que el tiempo, siempre este tiempo cruel, traerá las verdaderas respuestas.
¡Fe en Dios!
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