Los equipos de la NBA que vienen disputando los playoffs tomaron una radical postura para condenar el racismo y decidieron no disputar sus partidos, en reclamo por el caso de Jacob Blake, un hombre afroamericano que fue disparado en siete ocasiones por policías de Kenosha, Wisconsin el último domingo.
Los Ángeles Lakers, encabezados por LeBron James, además de los Clippers, los Milwaukee Bucks, entre otros, acordaron boicotear los encuentros programados para la noche del miércoles, por lo que la NBA acordó suspenderlos y reprogramarlos.
Siendo una postura que busca marcar un hito en el deporte estadounidense como plataforma de protesta contra la discriminación a personas de raza negra en el país, a los equipos de básquet se sumaron los de fútbol, pertenecientes a la Major League Soccer, quienes determinaron tomar la misma posición.
Por esta razón, cinco duelos, Inter Miami-Atlanta FC, Dallas-Colorado, Real Salt Lake-Los Ángeles FC, San Jose-Portland Timbers y LA Galaxy-Seattle Sounders fueron pospuestos por la MLS, que lo confirmó mediante un comunicado, en el que se adhiere a apoyar la decisión de los jugadores.
“Nos mantenemos en apoyo de la comunidad negra -incluyendo a nuestros empleados y jugadores- y compartimos su dolor, enojo y frustración. La familia de la MLS condena el racismo y siempre ha defendido la igualdad, pero necesitamos hacer más para dar pasos tangibles e impactar con un cambio”, reza el texto oficial.
Los futbolistas de Inter Miami y Atlanta FC ya se encontraban en el estadio cuando se tomó esta decisión, por lo que salieron al campo vistiendo polos con el texto ‘Black Lives Matter’ (las vidas negras importan), posaron juntos para una imagen y se retiraron hacia los camerinos.
Posteriormente, los demás clubes involucrados en la suspensión de partidos apoyaron la decisión de los jugadores a través de sus cuentas de Twitter.
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