Valeriano López se ha convertido en leyenda no sólo por sus goles, sino también por sus decisiones. Una de ellas: el rechazar jugar en el Real Madrid.,La carrera de Valeriano López estuvo marcada por el talento, los goles, excesos y algunas malas decisiones. Una de ellas fue, quizá, su negativa a jugar en el Real Madrid, uno de los equipos más grandes de Europa y del mundo. Nacido en Casma el 4 de mayo de 1926, marcó una época con sus cifras: 211 goles en 204 partidos durante su carrera (más de un gol por partido). Desde sus inicios en Sport Boys llamó la atención no sólo de los peruanos, sino también de la opinión extranjera. PUEDES VER Toni Kroos: "Me siento optimista sobre el partido con el PSG" En sus primeras tres temporadas en el cuadro rosado (1946 a 1948), Valeriano López jugó 54 encuentros y marcó 62 goles, convirtiéndose en el máximo goleador de la liga peruana. Todo apuntaba a que lograría el reconocimiento también en 1949, de no ser por sus inconductas. A poco de iniciarse el Sudamericano de ese año, el delantero fue sancionado por la escuadra chalaca después de haberse escapado de una concentración. Por esta razón se fue a buscar suerte en Colombia, en donde compartió canchas con leyendas de la talla de Alfredo Di Stéfano, Adolfo Pedernera, Roberto ‘Tito’ Drago, Segundo ‘Titina’ Castillo, entre otros. En el Deportivo Cali conformó una delantera letal, apodada ‘El rodillo negro’ y Valeriano López se ganó el sobrenombre de ‘El Tanque de Casma’. Los elogios por sus actuaciones llegaron hasta España, en donde directivos del Real Madrid no lo pensaron dos veces antes de lanzarle la oferta de jugar en ‘la Casa Blanca’. Sin embargo, el jugador dio una respuesta que hoy en día sigue causando sorpresa entre quienes conocen su historia: ´se negó a ir porque ‘no quería estar lejos de su familia’. Esta decisión cambió por completo la historia del fútbol, pues los españoles terminaron fichando al ‘plan B’, Alfredo Di Stéfano, quien luego se convertiría en la máxima leyenda del club. Fue el propio Santiago Bernabéu, en ese entonces dirigente del Real Madrid, quien reconoció que la historia es cierta. “Fui a buscar a Valeriano, porque jamás había visto un cabeceador tan extraordinario, pero luego volví por Alfredo. Y no me quejo… porque me dio cinco Copas de Europa”, contó. Un hecho que ha sido contado como anécdota por quienes lo recuerdan por su paso por Colombia es que Valeriano López aprendió el hábito armar cigarrillos con los dólares que recibía. Muchos de estos billetes se los regalaban los hinchas en agradecimiento por sus goles.