Migrantes venezolanos en Perú: ¿de qué manera se puede impulsar la integración?
El reto para un país de acogida es superar las barreras que actualmente obstaculizan la integración plena de los migrantes y refugiados. Nancy Arellano, presidenta de VeneActiva, plantea de qué manera se puede cumplir.
Al menos 1.5 millones de ciudadanos venezolanos se encuentran en Perú, es el grupo extranjero más grande que hay en el país, de acuerdo a la Plataforma R4V que actualizó su cifra hasta noviembre de 2023. La integración de los migrantes en el país de acogida es una tarea pendiente y para que se pueda facilitar, organizaciones como VeneActiva plantean una estrategia integral conocida como el Heptágono Migratorio.
¿Qué es el Heptágono Migratorio?
El Heptágono Migratorio se basa en siete ejes interrelacionados que buscan facilitar la ruta de arraigo de los migrantes venezolanos en Perú. "La ruta de arraigo busca en sí misma lograr que las personas migrantes y refugiadas puedan tener el ejercicio pleno de sus derechos y poder aportar a sus comunidades de acogida, logrando una integración plena", agregó Nancy Arellano, presidenta fundadora de VeneActiva.
¿Cuáles son los ejes que plantea el Heptágono Migratorio?
El primer eje, explica Arellano, es la regularización, que considera como "la llave para poder avanzar en términos de acceso a derechos" y que permite a los migrantes visibilizar su presencia en el territorio y acceder a los sistemas de protección y servicios del Estado.
El segundo eje se centra en la protección, asegurando el acceso a los sistemas de protección especialmente para los grupos más vulnerables como víctimas de violencia basada en género, mujeres embarazadas, niños, niñas, adolescentes y personas con discapacidad.
El tercer eje se enfoca en la acreditación educativa, reconociendo la formación técnica o profesional de los migrantes venezolanos, lo que facilita su inserción en el mercado laboral peruano.
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El cuarto eje se relaciona con los medios de vida, promoviendo el acceso a empleo seguro, digno y la posibilidad de emprender, lo que contribuye al desarrollo económico local.
El quinto eje, la integración sociocultural, destaca la importancia de la tolerancia y la creación de espacios para el desarrollo de las prácticas culturales de las comunidades migrantes.
Migrantes venezolanos en Perú junto con población de acogida. Foto: María José Vargas
El sexto eje, la participación cívica, reconoce a los migrantes y refugiados como parte del tejido social, otorgándoles derechos y deberes que incluyen la participación en la política local.
Finalmente, el séptimo eje se centra en la inclusión financiera, facilitando el acceso a servicios financieros y productos crediticios, lo que contribuye a la estabilidad económica de los migrantes.
El proceso de integración que se plantea desde VeneActiva puede llevarse a cabo entre tres y cinco años, dependiendo de la calidad migratoria de inicio, y destaca el papel crucial de las políticas del Estado peruano, como la política nacional migratoria 2017-2025.
Para Arellano, la implementación efectiva del Heptágono Migratorio no solo beneficia a los migrantes y refugiados, sino también a la sociedad peruana en su conjunto. "Lograr que las personas puedan tener regularización, acceder a sistemas de protección, acreditar su formación, obtener medios de vida lícitos, participar en la vida cultural y cívica, así como estar incluidos financieramente, es fundamental para una integración plena", destacó.
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