El Ajinomoto se ha convertido en un ingrediente esencial de la gastronomía peruana, aportando un sabor único a diversos platillos como el arroz chaufa, las lentejas, arroz con pollo, lomo saltado, ají de gallina y más. Desde que su creador, un científico japonés, descubrió este popular sazonador, este elemento de cocina ha trascendido fronteras, siendo utilizado en múltiples países de Sudamérica. Uno de ellos es el Perú.
Desde su llegada a tierras peruanas, Ajinomoto ha logrado posicionarse en el mercado gracias a su amplia gama de productos. Pero, ¿cómo se originó este popular sazonador de comida peruana y quién fue su creador? Aquí te lo contamos.
La historia de Ajinomoto comienza hace más de un siglo, cuando Kikunae Ikeda, un científico japonés y catedrático de la Universidad de Tokio, descubrió un nuevo sabor básico mientras degustaba un tazón de tofu hervido en kombu dashi. Este sabor, diferente a los cuatro ya conocidos (dulce, salado, ácido y amargo), lo llevó a investigar la composición de las algas utilizadas en el caldo.
Es así que, tras años de estudio, Ikeda identificó el aminoácido glutamato como el responsable de este sabor único, al que denominó “umami”, derivado de las palabras japonesas “umai” (sabroso) y “mi” (sabor). Con este descubrimiento, en 1908, el científico japonés decidió patentarlo y fundó Ajinomoto, marcando el inicio de la producción industrial de este sazonador umami, que rápidamente ganó popularidad en todo el mundo.
Ajinomoto se ha convertido en uno de los sazonadores más populares en la cocina peruana. Foto: Ajinomoto
La llegada de Ajinomoto al Perú se produjo en 1949, y en 1968 se inauguró su filial en Lima. Desde entonces, la empresa ha crecido significativamente, ofreciendo una variedad de productos que incluyen Aji-no-moto, Aji-no-sillao, y Aji-no-men, entre otros. Actualmente, Ajinomoto cuenta con más de 30.000 trabajadores y se ha consolidado como un referente en el mercado de sazonadores en el país.
El sazonador ha sido bien recibido por los peruanos, quienes lo han integrado en su cocina diaria, realzando el sabor de platos emblemáticos como el ají de gallina y el chaufa.
En el Perú, la materia prima principal para la elaboración del glutamato monosódico es la melaza de caña de azúcar. En otros países, dependiendo de la disponibilidad de la materia prima, se elabora a base de otros alimentos ricos en glucosa como el maíz, el arroz, la betarraga, la yuca, entre otros.
Su producción se realiza gracias a la fermentación, proceso biotecnológico que transforma la glucosa en glutamato monosódico (GMS), reduciendo la cantidad de sodio en un 37% sin disminuir el sabor de las comidas. Asimismo, la caña de azúcar pasa por un biociclo, un proceso instalado desde hace 40 años a través del cual se utilizan los residuos de la caña para fabricar fertilizantes para campos de cultivo.
La invención del método de producción industrial del Ajinomoto está catalogada como uno de los 10 inventos más importantes de Japón.
El éxito de Ajinomoto ha llegado hasta Sudamérica. Además de Perú, esta empresa cuenta con presencia en Ecuador, Chile, Bolivia, Brasil y Colombia. En tanto, en Europa, este sazonador se encuentra presenten en Bélgica, Polonia, España y Turquía, según se lee en su portal web.