Cargando...
Datos lr

¿Añadir aceite al cocinar fideos o pastas evita que se peguen? La verdad detrás del mito

Al cocinar pastas, fideos o tallarines es común verter un poco de aceite para evitar que se peguen. Sin embargo, la ciencia ha demostrado qué tan efectivo es realmente en ello este producto graso.

larepublica.pe
¿Verdad o mito? Conoce si deberías echarle aceite al agua de los fideos para evitar que se peguen. Foto: composición LR/Comemucho/Buenazo

¿Verdad o mito? Al cocinar los fideos o la pasta es una costumbre que se vierta un chorrito de aceite sobre el agua que se usa para cocerlos. Este ‘secreto de la abuela’ es empleado por muchas personas para evitar que los tallarines se peguen en el fondo de la olla. Sin embargo, el tradicional hábito no cumpliría dicha función, sino una totalmente diferente y que pocos conocen, según explicó el experto en cocina Heinz Wuth mediante su cuenta de TikTok.

En esta nota de La República, te contamos por qué el aceite no es un producto efectivo para lograr que tus espaguetis no se adhieran al cocinarlos.

¿Por qué no deberías echarle aceite al agua de los fideos?

De acuerdo con el cocinero y creador de contenido Heinz Wuth, echarle aceite al agua de los fideos no es una buena idea. Según explicó en su canal “Soy ciencia y cocina”, la respuesta a ello se encuentra en la ciencia.

El aceite, al ser una sustancia no polar, hidrofóbica y con una densidad menor, no logra combinarse con el agua, por lo que se queda flotando en la superficie, mientras que, por otro lado, los tallarines, debido a su peso, se hunden y quedan al fondo de la olla. Estas propiedades físicas que tienen ambos alimentos hacen que, durante el proceso de cocción, no entren en contacto el uno con el otro.

Echarle aceite a los tallarines no evita a que estos se peguen en la olla. Foto: 20Minutos

Debido a ello, no sirve añadir aceite al agua de los espaguetis para evitar que se adhieran, pues estos se juntan debido a la cantidad de almidones que posee. En su reemplazo, explicó Heinz, es preferible remover los tallarines con un cucharón cada cierto tiempo para que queden perfectos y no se peguen.