Por medio de un decreto supremo, el presidente de la República debe establecer el nombre oficial del año 2022. Acuñarle un apelativo a los 365 días de una nueva anualidad es una tarea de semántica compleja, pues sintetiza el objetivo primordial del Gobierno para este periodo. En este caso, Pedro Castillo deberá hacer lo propio mediante el oficio antes mencionado para luego ser publicado en diario El Peruano.
El antecedente más reciente es del exjefe del Estado peruano Francisco Sagasti, quien anunció, a través del Decreto Supremo 001-2021-PCM, el nombre oficial del pasado 2021: “Año del bicentenario del Perú: 200 años de independencia”. En esta nota, revisa lo que implica el nombramiento del año.
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Si bien los y las representantes de los 19 ministerios son quienes mandan sugerencias para elegir el nombre del año, el presidente de turno es quien tiene la última palabra para oficializar la nomenclatura.
El nombre oficial del año se elige tras evaluar las propuestas que hacen durante el año los ministerios y otras entidades públicas. Entre todas las opciones, el mandatario de turno debe seleccionar la que mejor transmita el objetivo de su gestión.
En la mayoría de casos, los Gobiernos otorgan el nombre del año en memoria de algún peruano ilustre, la conmemoración de un hecho histórico o algún tema político, económico o social que se busca atender.
Una vez designado el nombre, el uso de este es obligatorio en documentos oficiales de instituciones públicas del Estado peruano. En cambio, de tratarse de una institución privada, su uso es de manera opcional.
El expresidente Fernando Belaúnde Terry dispuso durante su primer mandato, en 1963, que el Gobierno asigne un nombre oficial a cada año a fin de que pueda ser utilizado por todas las entidades públicas. Ese año lo denominó como “Año de la alfabetización”.
El nombre del año se considera importante porque transmite los objetivos del Gobierno del Perú. Asimismo, este debe ser utilizado de manera obligatoria por todas las entidades públicas con la finalidad de que se reconozcan y promocionen los temas que marcan la agenda del Gobierno, y también para conmemorar a algún personaje peruano ilustre o celebrar alguna efemérides de carácter nacional.