Cada año varían las fechas de Semana Santa y existen razones para ello. Considerada como una de las celebraciones más importantes del año para los cristianos, la Semana Santa conmemora la muerte y resurrección de Jesús. De hecho, durante los tres primeros siglos era la única fiesta que celebraban.
A estos días se le llamaba en un inicio “La Gran Semana”. En la actualidad se denomina “Semana Santa” o “Semana Mayor” y a sus días se les dice días santos. La Semana Santa comienza con el Domingo de Ramos y termina con el Domingo de Pascua.
Para los judíos, la Pascua, también conocida como Pésaj por su nombre en hebreo, es una celebración que recuerda la libertad de su pueblo de la esclavitud de Egipto, relatada en el libro del Éxodo, en el Antiguo Testamento de la Biblia.
Esta festividad se celebra cada año en el día 15 del mes hebreo de Nisán, que empieza con la primera luna llena de primavera, ya que los días y las fechas de las ceremonias religiosas judías se determinan por las fases lunares.
Por ello, acorde a los evangelios, fue justamente en Pésaj cuando Jesús se reunió con sus discípulos en La Última Cena para recordar la salida de Egipto. Es por esta razón que cada año la Semana Santa cambia de día, pues debe coincidir con esta luna llena.
Los días feriados en Semana Santa en Perú son el jueves 1 de abril y el viernes 2 de abril.
Al ser considerado el Viernes Santo como una fecha representativa para el cristianismo porque se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús de Nazaret, la Iglesia Católica manda a sus fieles no comer carne roja debido a que representa el cuerpo de Cristo crucificado, además de ser una forma de guardar ayuno y abstinencia como penitencia.
Otra de las razones para evitarla en este día es porque está asociada a celebraciones y banquetes, y el Viernes Santo no es una fecha para festejar, sino de conmemoración del sacrificio de Jesús.
La Pascua judía celebra que el Señor haya sacado al pueblo de Israel de su cautiverio en Egipto e inicia en una fecha exacta: el día 15 del mes de Nisán.
Por otro lado, la Pascua cristiana festeja la resurrección de Jesucristo. Desde el I Concilio Ecuménico de Nicea en el año 325, se celebra en la luna llena después del equinoccio primaveral.