Agencias

Israel mantiene cinco posiciones en el sur de Líbano tras expirar el plazo para retirarse


El ejército israelí se retiró el martes de las localidades que ocupaba en el sur de Líbano, pero afirmó que mantendrá cinco posiciones en la zona pese a expirar el plazo fijado para su retirada por el acuerdo de tregua con Hezbolá.

"El ejército libanés se está desplegando gradualmente debido a la presencia de explosivos en algunas zonas y los daños en las carreteras", indicó a AFP una fuente de seguridad libanesa.

Poco después, el ministro israelí de Defensa, Israel Katz, confirmó que sus tropas conservarán cinco posiciones estratégicas a lo largo de la frontera entre los dos países pese a que las autoridades libanesas insistían en una retirada total.

El ejército israelí "permanecerá en una zona de amortiguamiento en Líbano con cinco puestos de control y seguirá actuando de forma coercitiva y sin concesiones contra cualquier violación" de la tregua por el movimiento libanés proiraní Hezbolá, afirmó Katz en un comunicado.

Israel presentó esta decisión como "una medida temporal hasta que las fuerzas armadas libanesas puedan aplicar plenamente el acuerdo".

Según el acuerdo de tregua del 27 de noviembre entre Israel y Hezbolá, las tropas israelíes deberían abandonar completamente el Líbano el 18 de febrero, tras un primer aplazamiento de la fecha inicialmente fijada para el 26 de enero.

"En coordinación con el comité del quinteto encargado de supervisar el acuerdo de alto el fuego (...) y con la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano", la FINUL, las unidades libanesas tomaron posiciones en una decena de localidades del sur del país tras la partida de las fuerzas israelíes, informó un comunicado del ejército de Líbano.

Según el canal libanés LBCI, sus tropas se desplegaron "durante la noche" en las localidades de Yarun, Marun, Blida, Mahbib y Mais al Yabal.

- Regresar a sus hogares -

El acuerdo del cese el fuego puso fin a dos meses de guerra abierta entre Israel y Hezbolá, durante los cuales las tropas israelíes tomaron posiciones en la zona del sur de Líbano fronteriza con el norte de Israel.

Los bastiones de Hezbolá en el sur y este de Líbano y al sur de la capital, Beirut, sufrieron grandes daños durante los dos meses de conflicto que se sumaron a un año de hostilidades transfronterizas iniciadas tras el conflicto en la Franja de Gaza.

Unos 100.000 libaneses, entre más de un millón de desplazados por el conflicto, permanecen en el exilio, según la ONU.

A pesar de la destrucción, sobre todo en los pueblos fronterizos, los desplazados esperan poder regresar a sus hogares para evaluar el estado de sus viviendas y recuperar los cadáveres de los combatientes presentes entre sus familiares, algunos muertos desde hace meses.

Es el caso de Fatima Shukeir, una sexagenaria que huyó de Mais al Yabal hace año y medio.

"Mi mayor deseo es sentarme frente a mi casa, junto a mis flores, y disfrutar de una taza de café por la mañana", dijo a AFP.

Varios municipios pidieron a sus habitantes que, antes de regresar, esperan al despliegue del ejército libanés en la zona para garantizar su seguridad.

Según los términos del acuerdo de tregua, Hezbolá se comprometió por su parte a desmantelar sus infraestructuras y a retirarse al norte del río Litani, a unos 30 km de la frontera israelí.

Este poderoso movimiento armado que ha dominado la vida política de Líbano durante años fue fundado y financiado por Irán, enemigo jurado de Israel.

Al comienzo de la guerra en la Franja de Gaza, desencadenada por el ataque del movimiento islamista palestino Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, Hezbolá abrió un frente contra Israel, disparando cohetes contra territorio israelí desde sus bastiones en el sur de Líbano.

Afirmó actuar "en apoyo de los palestinos" y de su aliado Hamás, otro movimiento proiraní.

Los disparos transfronterizos degeneraron en septiembre de 2024 en una guerra abierta de la que Hezbolá salió debilitado y sus dirigentes diezmados.

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