Gobierno de Trump evalúa entregar cheques de US$2.000 a sus ciudadanos en 2026 gracias a la recaudación de aranceles
La propuesta depende de la aprobación de una ley por parte del Congreso que permita el uso de estos ingresos para realizar pagos directos a los ciudadanos de Estados Unidos.
- Trump anuncia que Estados Unidos ejecutó "numerosos ataques" contra terroristas del Estado Islámico en Nigeria
- Zelenski se reunirá con Donald Trump este domingo 28 para hablar sobre el plan de paz en Estados Unidos

Estados Unidos viene evaluando la opción de ofrecer pagos de hasta US$2.000 dólares a sus ciudadanos en 2026, financiados por los ingresos obtenidos a través de aranceles. Esta propuesta ha vuelto a tomar relevancia dentro de la agenda económica federal y podría traducirse en un reembolso directo para los contribuyentes.
La idea fue mencionada por el presidente Donald Trump y respaldada por asesores económicos de la Casa Blanca, aunque su implementación aún no está garantizada. El avance del plan depende de un factor clave que aún no se ha resuelto a nivel institucional.
PUEDES VER: Zelenski se reunirá con Donald Trump este domingo 28 para hablar sobre el plan de paz en Estados Unidos

Un cheque que se encuentra en espera
La administración admite que los pagos no pueden aprobarse de inmediato. Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional, explicó que para que esta medida se lleve a cabo es necesario que el Congreso apruebe una ley específica que permita al Departamento del Tesoro usar los ingresos de los aranceles para realizar pagos directos.
Asimismo, Hassett adelantó que Trump presentará una propuesta formal ante el Congreso en el próximo año. Mientras tanto, no se emitirán cheques ni se fijarán fechas concretas. El mayor desafío del plan es el legislativo, ya que requiere modificar el código tributario, algo que solo puede hacerse con la aprobación del Parlamento.
Washington defiende su propuesta económica
La Casa Blanca sostiene que los aranceles generan suficientes ingresos, los cuales podrían redistribuirse para financiar esta medida. Sin embargo, algunos legisladores han expresado preocupaciones sobre el impacto fiscal de una propuesta de tal magnitud. Mientras no se apruebe una ley, el proyecto quedará suspendido, aunque Trump sigue considerándolo una de las promesas clave de su plan económico.
Aún está en discusión si el pago será para todos los ciudadanos o si se limitará según el nivel de ingresos. Expertos señalan que el costo fiscal total de la medida sería alto, lo que podría dificultar su avance en el Congreso.
Dudas sobre el presupuesto
Hassett afirmó que las cifras más recientes respaldan el plan. Estados Unidos ha registrado trimestres de crecimiento económico cercano al 4 % y varios meses con superávit fiscal. Además, el déficit federal se habría reducido en aproximadamente 600,000 millones de dólares en comparación con el año pasado. Trump argumenta que estos resultados abren la posibilidad de emitir cheques de reembolso a mediados de 2026.
Sin embargo, los cálculos de organismos independientes han generado preocupaciones. El Laboratorio de Presupuesto de Yale estima que un pago único de 2.000 dólares para personas con ingresos menores a 100,000 dólares costaría alrededor de 450,000 millones de dólares. Según esas proyecciones, los aranceles generarían aproximadamente 240,000 millones de dólares en 2026, una cifra que sería insuficiente para cubrir el costo total de los pagos.
Especialistas advierten peligrosas consecuencias
Otros estudios, como los realizados por la Tax Foundation, estiman que el costo de la medida económica podría oscilar entre 279,800 millones y 606,800 millones de dólares. En todos los casos, el impacto sería un aumento en el déficit federal.
Los expertos señalan que las casas ya están pagando el costo de los aranceles. Entre febrero y noviembre de 2025, estos impuestos habrían representado un gasto promedio de 1,197.50 dólares por hogar.
Para algunos economistas, eliminar los aranceles sería una forma más efectiva de reducir la presión sobre los precios. Por ahora, el plan de los cheques sigue en pie, pero sin una solución clara sobre cómo llevarlo a cabo.























