La evolución del control remoto: de prender la TV usando luz a solo encenderla hablando

El control remoto del televisor es uno de los dispositivos infaltables en el hogar, ya que permite dar inicio al sistema del aparato y hacer uso de las diferentes funciones que pueda tener el equipo.

Hoy en día, las marcas oficiales y genéricas han desarrollado un sinfín de modelos y diseños para estos útiles componentes, aunque en el pasado era mucho más complicado poseerlos, al punto de que los consideraban objetos de mucho valor.

La historia de este equipo trasciende desde hace 70 años, aproximadamente, cuando el televisor tenía la complicación de tener que prenderse manualmente. Por ello, los expertos de la época crearon el primer control remoto, el cual fue evolucionando hasta lo que hoy nos permite tan solo hablar para poder acceder a nuestros programas y películas favoritos.

Control de luz

En la década de los 50, Estados Unidos era uno de los países que más había avanzado en cuanto a tecnología de producto, lo cual permitió la creación de este dispositivo, que, en sus inicios, tan solo podía usarse mediante un sensor de luz.

Si bien este método suena innovador para esos años, lo cierto es que muchos usuarios terminaron quejándose por la mala señal que a veces evidenciaba. A pesar de ello, fue un boom para la época y consolidó a la compañía Zenith Electronics como la pionera en esta línea, junto a la empresa Flashmatic, que proveyó la tecnología para este dispositivo.

Básicamente, el control remoto permitía silenciar el sonido, cambiar los canales hacia arriba o hacia abajo, tan solo con hacer parpadear el botón en la esquina de la pantalla.

Comando Espacial y el primer control con teclas

Posteriormente, Zenith no hizo caso omiso a los reclamos por su primer control desarrollado y eliminó los rayos de luz para idear un sistema en el que se pueda ‘hablar’ con la televisión. Al comienzo, la idea de usar ondas de radio fue descartada, por lo que, con el fin de quitar el método para apuntar en cierta parte de la pantalla, propusieron colocar los primeros botones.

Fue así cómo nació el denominado Comando Espacial, que funcionaba como un equipo ultrasónico que utilizaba pequeños martillos que golpeaban internamente varillas de aluminio que controlaban el volumen y el cambio de canal, como también otros nuevos apartados: el menú.

Controles numéricos

Ya en los años 70, los botones eran bastante limitados para poder ampliar la experiencia del usuario, por lo que en 1974 Ceefax, una empresa británica que se dedicaba al servicio de frecuencias de TV analógicas en el Reino Unido, quiso revolucionar las opciones de un control remoto normal.

Fue así como la compañía, tomando en cuenta que ahora se podían reproducir otros formatos audiovisuales, instauró las opciones de retroceder, pausar, adelantar, pero, sin dudas, lo más importante fue el añadido de números, que dio pase al libre albedrío para decidir qué canal sintonizar sin tener que pasar por varios.

Luz infrarroja y tecnologías actuales

Hablando de años más recientes, aunque no tanto, las empresas vieron que los controles de videojuegos estaban avanzando a mayor nivel que las que se dedicaban a la producción de televisores. Por ello, añadieron la luz infrarroja, que permitió con el tiempo que el control ya no genere tanto sonido.

Entre los años 80 y 90 se dio pase a los clásicos controles remotos que hoy en día conocemos, los cuales simplemente se han ido modificando con nuevas tecnologías y botones más eficientes para poder usar en plataformas de streaming, juegos, páginas web, etc.

Por otro lado, los asistentes virtuales en dispositivos también cumplen actualmente el rol de control remoto, al igual que los celulares, aunque los primeros mencionados son más directos y multifuncionales, ya que realizarán lo que el propietario mande en momento real.

¿Para qué sirve el puerto USB que está detrás del router y cómo puedes aprovecharlo?

Cargar otros dispositivos

Uno de los usos más comunes, y tal vez obvios, que se le puede dar al puerto USB del router es el de cargar la batería de otro equipo, como por ejemplo un celular, tablet u otro cualquier otro dispositivo que tenga la misma entrada. Cabe resaltar que esta conexión no garantiza que funcione de la misma manera que con un cargador normal, pero es una gran alternativa cuando ocurra una emergencia.

Automatizar copias de seguridad

Por otro lado, al tener un sistema más complejo, es posible mejorar la seguridad de tus datos, pues se pueden crear copias de seguridad adicionales de manera automática si se conecta un dispositivo USB o un disco duro al router. Solo bastará con instalar un software para que cada cierto tiempo se genere este apartado de seguridad.

Crear un servidor con una memoria USB o disco duro

Asimismo, es posible crear un acceso directo al contenido que tenga otro dispositivo, lo cual prácticamente funcionaría como un nuevo servidor para almacenar elementos virtuales. En otras palabras, se podría guardar y encontrar archivos como cualquier memoria de un ordenador, a fin de ver contenido multimedia como fotos y videos desde otro instrumento que esté conectado a la red WiFi.