Indígenas llegaron al aeropuerto para recibir al aspirante presidencial de Progresando Perú. Lo alentaron, pero también lo conminaron a cumplir sus promesas de campaña., Elizabeth Prado Enviada especial El miércoles 28 de octubre, cientos de pobladores shipibo-conibo acudieron al terminal aéreo de la ciudad de Pucallpa para recibir a un personaje en quien han depositado toda su confianza y también la esperanza de ser rescatados del olvido en que han vivido y continúan viviendo los pueblos indígenas amazónicos. PUEDES VER: Elecciones 2016: Julio Guzmán está convencido de llegar a segunda vuelta Se trataba de Miguel Hilario Escobar, un shipibo-conibo de 45 años, con estudios de Economía y de posgrado en las universidades de Stanford y Oxford, que hoy es el candidato presidencial del Partido Progresando Perú. A las 9:40 de la mañana, con los brazos en alto y una sonrisa sin fin, Hilario saludó a los indígenas que habían llegado desde Purús, Atalaya, Tahuanía, Contamana y Masisea para respaldarlo. Ahí también estaban los estudiantes indígenas de la Universidad Nacional Intercultural de la Amazonía (Unia) y su madre, Zoila Escobar. El sonido de los tambores y tarolas se hizo más fuerte al momento en que el candidato nativo, vestido con cushma y corona jefatural, cruzó la alfombra roja y blanca que habían elaborado con diseños shipibos. Luego se desató una fiesta general ante la sorprendida mirada de los pocos turistas que llegaron ese día a Pucallpa. A los gritos de 'Miguel presidente', sus seguidores se dirigieron en caravana hacia la Plaza de Yarinacocha donde se realizó un mitin. Antes de su intervención, Hilario escuchó el mensaje de apoyo y las expresiones de orgullo "por tener a un hermano amazónico que va a llegar al Palacio de Gobierno y con su riqueza intelectual nos va dar buenas ideas". Hasta que el candidato presidencial del partido Progresando Perú inició su alocución. La atención era total. Cual predicador antiguo, pausado y sin gritos, les relató que nació en una canoa en momentos que su madre surcaba el río Ucayali y que como todos ellos, de niño, empezó a trabajar vendiendo 'curichis' (marcianos). "Trabajé y estudié duro para ganar una beca en Estados Unidos e Inglaterra. He regresado para darles la misma oportunidad que he tenido y para convertir a la amazonía en la capital del ecoturismo de Latinoamérica", dijo, interrumpido por los gritos de 'Hilario tiene que ser'. Luego prosiguió: "Tú y yo tenemos el poder de cambiar la historia del Perú. Tenemos contrincantes fuertes, pero como buen guerrero voy a pelear con todos. Les pido de todo corazón que trabajemos hasta la victoria", demandó. Mas tarde se reunió con los estudiantes de la Unia. Con ellos trató sobre la reactivación y diversificación de la economía, de su interés en una economía de mercado para lograr el crecimiento del país. Y reclamó que el crecimiento de los últimos 20 años no haya llegado a la amazonia. "La minería significa el 4.7% del Producto Bruto Interno, es pequeño, pero los economistas nos hacen creer que el Perú es un país minero", reclamó al tiempo de indicar que frente a la desaceleración económica el Perú debe apelar al turismo. Hacia Caimito Al día siguiente, Miguel Hilario partió hacia la comunidad de Caimito, donde nació y creció. En el trayecto se detuvo en la comunidad de Puerto Alegre para explicar su proyecto político. La receptividad fue tal que inmediatamente se conformó un comité de apoyo. Su arribo a Caimito lo llenó de emoción. Es la comunidad más antigua del río Tamaya. Moran 200 familias y su población infantil supera los 300. No tiene luz ni agua potable. La bienvenida fue con redoble de tambores y cientos de niños gritando su nombre. El jefe de la comunidad y delegaciones de Unipalo, Buenos Aires y Nuevo Loreto le expresaron que valoraban y sentían la candidatura "de un hermano shipibo". Pero fue en Puerto Alegre donde Percy Bendino, antiguo ex presidente del Comité de Autodefensa, y ahora miembro del comité de apoyo partidario, le dijo con la rectitud de un padre. "Has empezado con el corazón blanco para luchar por el pueblo amazónico. El día que te olvides de tus hermanos tocaré tu puerta y te daré una patada", sentenció. “Es tranquilo, habla bien y no tiene miedo” Zoila Escobar Valles, madre de Miguel Hilario, refirió que el candidato presidencial es el tercero de sus cinco hijos y único varón. Dijo que tres días después de que él naciera en una canoa, el niño fue atacado por una fuerte infección y una enfermera lo salvó de morir. Está convencida de que su hijo tuvo mucha suerte en la vida "Lo veo muy tranquilo, habla bien, no tiene miedo a nadie y eso me pone muy orgullosa", comenta. Y agrega: "Mi hijo se casó con una norteamericana a los 21 años. Tengo dos nietas a quienes conozco. La mayor que tiene 21 años vino a verme y me ha dicho que me ama. Ella habla inglés pero mi hijo lo traduce", cuenta. De su esposo, Zoila indica que no está porque es muy tímido, porque cree que no sabe hablar bien el castellano. "Miguel nos invitó a los dos para su graduación en los Estados Unidos. Yo fui sola, él no quiso. Siempre tiene miedo", fue su queja. Claves Estudió Economía en la Universidad Estatal de California y en la Universidad de Stanford. Realizó maestrías en Política y Antropología, además de un doctorado en Antropología. También hizo un diplomado en Política y Economía en la universidad de Oxford. Trabajó en el BID y en Unicef. También prestó servicios para los gobiernos de Estados Unidos y Perú.