Estados Unidos

Caída en el precio de la gasolina en USA: Las razones detrás de esta tendencia y cuánto podría costar en Estados Unidos

El costo de la gasolina en Estados Unidos ha mostrado una tendencia a la baja desde mediados de 2023, con expectativas de continuar descendiendo en los próximos meses.

El costo de la gasolina en Estados Unidos ha mostrado una tendencia a la baja desde mediados de 2023, con expectativas de continuar descendiendo en los próximos meses. Foto: composición de Jazmin Ceras / La República
El costo de la gasolina en Estados Unidos ha mostrado una tendencia a la baja desde mediados de 2023, con expectativas de continuar descendiendo en los próximos meses. Foto: composición de Jazmin Ceras / La República

La economía estadounidense vive un momento de fluctuación en el mercado de los combustibles, y la gasolina no es ajena a este fenómeno. Mientras muchos se preguntan qué factores están influyendo en los precios, la respuesta puede no ser tan simple como parece. La relación entre la oferta y la demanda, junto con variables globales y locales, juega un papel crucial en este escenario.

Recientemente, se ha observado una disminución en el costo del combustible en varias regiones del país, sorprendiendo tanto a consumidores como a expertos del sector. Sin embargo, es importante destacar que esta tendencia no es permanente y podría verse afectada por eventos futuros impredecibles.

Factores que influyen en la baja de precios

Según Forbes, la reciente caída en los precios de la gasolina se debe principalmente a una menor demanda y a la reducción en el costo del petróleo. Este respiro económico para los consumidores llega después de un año marcado por precios récord del combustible, que impulsaron la inflación a lo largo de gran parte del año anterior. Los expertos prevén que, a medida que se acerque la temporada invernal en el hemisferio norte, tras el final del verano, los precios continuarán bajando, con proyecciones que los sitúan por debajo de los USD 3 por galón para finales de octubre.

La baja en la demanda ha sido un factor decisivo. La temporada de viajes de verano en el hemisferio norte, un periodo que generalmente implica un alto consumo de gasolina, concluyó sin que se registrara un aumento significativo en el uso de combustible. Esto ha permitido que los precios comiencen a descender de forma continua desde el otoño de 2023. Además, la mejora en el suministro de petróleo en los últimos meses ha ayudado a mantener los precios estables, a pesar de algunas fluctuaciones momentáneas en el mercado.

Las previsiones del precio futuro

A pesar de los aumentos puntuales, las perspectivas a largo plazo son favorables para los precios de la gasolina en Estados Unidos. Se estima que el costo promedio del combustible seguirá bajando en 2024 y 2025. De acuerdo con las proyecciones de la Administración de Información Energética (EIA), el precio promedio para lo que queda de este año será de USD 3.40 por galón, mientras que para 2025 podría disminuir aún más, llegando a los USD 3.20 por galón. Este descenso representa una mejora respecto al promedio de USD 3.50 por galón que se registró en 2023.

La reducción de los precios es una noticia positiva para los consumidores, quienes han enfrentado altos costos debido a la inflación. Aunque los precios de la gasolina han fluctuado a lo largo del año, los estadounidenses ya están viendo un alivio significativo, pagando en promedio 35 centavos menos por galón en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este descenso es especialmente relevante en un contexto donde el precio del combustible afecta el costo de vida de millones de familias.

Las previsiones de una caída en los precios a largo plazo generan expectativas optimistas entre los analistas, quienes confían en que las condiciones del mercado energético continúen estabilizándose. Sin embargo, factores globales como la producción de petróleo y la demanda mundial seguirán siendo determinantes en la evolución de los precios del combustible en los próximos años.

El impacto en los bolsillos de los estadounidenses

Para los ciudadanos, la baja en el precio de la gasolina representa un alivio económico, especialmente en un contexto de inflación elevada en otros sectores. La disminución de los costos de transporte también tiene efectos en el precio de bienes y servicios, dado que reduce los gastos logísticos de las empresas. Esto podría, a su vez, reflejarse en una desaceleración en el ritmo inflacionario general.

Por otro lado, si bien este descenso es positivo para los conductores, algunos expertos advierten que podría ser temporal. Las tensiones internacionales y la posible reducción de la producción por parte de la OPEP+ podrían revertir la tendencia en cualquier momento, lo que elevaría nuevamente el costo de la gasolina.