Economía

¿Cómo hacer un buen uso de las tarjetas de crédito? Aquí 4 consejos

En un contexto de constantes desafíos económicos, la tarjeta de crédito puede ser una alternativa de financiamiento muy útil; sin embargo, su uso excesivo puede generar fuertes desequilibrios contables.

El uso adecuado de las tarjetas de crédito ayudan a construir un buen historial crediticio. Foto: Andina.
El uso adecuado de las tarjetas de crédito ayudan a construir un buen historial crediticio. Foto: Andina.

En la actualidad nos enfrentamos a constantes desafíos financieros, por lo que se recurre frecuentemente al uso de tarjetas de crédito como una herramienta para hacer frente a diversos gastos. No obstante, a pesar de que estas tarjetas ofrecen alternativas de financiación, su uso excesivo, sin un control adecuado, puede afectar negativamente el manejo regular de las deudas.

“Una de las principales ventajas de usar la tarjeta de crédito es que permiten tener un disponible siempre en el bolsillo, además de la flexibilidad en las formas de pago a corto o largo plazo y el aumento de millas para viajes con descuentos. Sin embargo, es importante que los usuarios tengan una correcta educación financiera para evitar peligros contables”, comenta Enzo Giampier, especialista financiero.

En ese sentido, Giampier brinda cuatro consejos para hacer un buen uso de las tarjetas de crédito:

1.- Elaborar un presupuesto: Es indispensable identificar los ingresos netos y los gastos fijos que se tendrán, teniendo en cuenta la importancia de cuestionarse si se podrá contar con ingresos extras, como el pago de aguinaldos o gratificaciones, para poder generar gastos con seguridad. Crear una lista de compras o pagos ayudará a priorizar necesidades y evitar gastos innecesarios.

2.- Programar pagos: Para evitar pagar altos intereses de la tarjeta de crédito de manera repentina, se recomienda que en meses de mayor consumo económico se use la técnica financiera del “ruleteo”, la cual comprende posponer la deuda para el siguiente mes, de modo que el comprador tenga un tiempo prudente de pago y organización.

3.- No dejar de usar la tarjeta: Si es que se tiene una tarjeta activa, se sugiere realizar cualquier tipo de compras con ella, así sea de montos mínimos. Esto para no dejar de generar fluidez económica mensual y para aplicar a los grandes y exclusivos descuentos que se ofrecen en diferentes sectores del mercado. Tales como ofertas y descuentos en productos y cupones.

4.- Elegir sabiamente el financiamiento: En casos estrictamente necesarios, es recomendable solicitar un financiamiento. Cuando no se dispone de efectivo suficiente, se puede solicitar un préstamo de emergencia, ya que tiene menos intereses que pagar con una tarjeta de crédito. Antes de solicitarlo, analizar las cuotas mensuales que se deberán pagar y si podrán ser cubiertas dentro del presupuesto personal para que no se tengan futuras complicaciones financieras.

“La tarjeta de crédito es un instrumento financiero muy importante, que puede salvar muchas urgencias, en especial si se le da un uso correcto como medio de pago y no de endeudamiento. Por ello, siempre es importante tener un asesoramiento previo a cualquier uso que se le quiera dar”, añade Giampier.

Finalmente, tomando en cuenta que el uso responsable del crédito es positivo porque permite apalancarse financieramente, la sugerencia es adquirir créditos que estén dentro de las capacidades de pago. Asimismo, si el comportamiento del consumidor es positivo y crea un buen historial crediticio, le ayudará a poseer una buena reputación que le abrirá las puertas a otras opciones de financiamiento.