América Latina: ola de nuevos negocios impulsa expansión de fintech de la región
Perú suma unos 81 emprendimientos tecnológicos financieros y estos se clasifican en su mayoría como plataformas de pagos y remesas.
Aplicaciones para invertir en línea, bancos 100% digitales o billeteras virtuales son algunas de las soluciones desarrolladas por la emergente industria tecnofinanciera o fintech de Latinoamérica que crece a pasos agigantados con una ola de nuevos negocios.
La industria creció más del 66% en la región desde la última medición del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista, hasta alcanzar un total de 1.166 empresas, según el reporte “Fintech América Latina 2018: Crecimiento y consolidación”.
Este concluyó que las fintech latinoamericanas están centradas en ofrecer préstamos y financiación colectiva o crowdfunding (25%), pagos y transferencias (24%) y administración financiera de empresas e individuos (15%).
Hoy sus operaciones se focalizan en Brasil (33%), México (23%), Colombia (13%), Argentina (10%) y Chile (7%), que en conjunto representan el 86 % del total de la actividad regional.
Uno de los aspectos más destacados es que cerca del 35% de las fintech latinoamericanas tienen una mujer fundadora o una en el equipo fundador, muy por encima del promedio mundial estimado en 7%.
“La industria fintech de Latinoamérica está en un período de alto crecimiento y consolidación que no muestra signos de desaceleración”, respondió a Efe el equipo Fintech de la División de Conectividad, Mercados y Finanzas del BID.
Muestra de ello es que el 25% del total de las inversiones de capital emprendedor en el sector de tecnología de la región en 2018, un promedio de 2mil millones de dólares, se destinó a fintech tanto en número de operaciones como en monto en dólares.
“Esta cifra va a crecer, dado que SoftBank, uno de los mayores inversores en ‘fintech’ en el mundo, anunció un fondo de 5 mil millones de dólares dedicado exclusivamente a empresas tecnológicas de la región”, apuntó.
Panorama prometedor
El BID prevé que “la internacionalización de las fintech va a continuar expandiéndose ya que, con pocas excepciones, los mercados de cada país aún son pequeños para alcanzar la escala necesaria.
“México y Brasil parecen ser dos de los destinos favoritos de los emprendedores, principalmente por el tamaño del mercado potencial pero también por la certeza regulatoria. Algunas ‘fintech’ colombianas están expandiéndose o abriendo empresas en estos países”, apuntó.
Asimismo, el BID pronostica “la tendencia de una transición de plataformas monoproducto a multiproducto, como otra forma de crear escala y llegar a mercados más amplios. Esto viene acompañado de alianzas y fusiones con instituciones financieras tradicionales o la transición a la banca abierta, dependiendo de los mercados”.
Fintech por países
Las fintech están respondiendo tanto a una demanda de servicios creciente como a la exclusión financiera que persiste en Latinoamérica, en tanto que el 45% de los adultos de la región todavía están apartados de los servicios financieros formales al no contar con una cuenta.
Perú suma unos 81 emprendimientos tecnológicos financieros y estos se clasifican en su mayoría como plataformas de pagos y remesas (27,2 %).
Brasil es líder en tecnofinanzas en la región con casos como el de la aplicación Guiabolso, el banco digital Creditas o la operadora financiera Nubank, uno de los unicornios brasileños.
México tiene unas 500 empresas fintech, de las cuales 200 operan bajo la Ley Fintech promulgada en marzo de 2018.
Colombia tiene al menos 148 compañías fintech, una cifra que creció en 2018 un 76% con respecto al año anterior y coloca al país en la vanguardia de la región, según la consultora KPMG.
La Cámara Argentina de Fintech contabilizó 133 empresas de este tipo en el país el año pasado y casi la totalidad puede categorizarse como pyme.
En Chile hay unas 120 empresas, número que se prevé que siga creciendo entre el 15% al 20 % anual gracias al capital de riesgo y al mayor apetito de los inversionistas, dijo a Efe el director ejecutivo de FinteChile, Ángel Sierra.
Uruguay contabiliza unas 30 empresas fintech, la mayoría de estas con un promedio de diez empleados cada una, aunque también hay unas tres o cuatro grandes, en rubros como préstamos al consumo y sistema de pagos.
En cambio, las fintech en Paraguay tienen escasa proyección dada su reciente inserción que se remonta a poco más de cinco años y desde entonces funcionan unas 40 empresas.
La escasez de efectivo, la hiperinflación y la paralización de los servicios bancarios ha impulsado el surgimiento de negocios fintech como alternativa a la crisis en Venezuela. “El mercado venezolano es muy receptivo. Cuando le preguntamos a la gente si estaría dispuesta a utilizar un método distinto a los ofrecidos por la banca, la gente responde que sí, siempre y cuando las comisiones sean inferiores y tengan disponibilidad 24/7”, manifestó a Efe la cofundadora de Fintech Venezuela, María Elena Machado.
Bolivia no dispone de una ley que rija el funcionamiento, otorgue la autorización o controle a las fintech, aseguró a Efe el economista miembro del directorio del Banco Central boliviano, Abraham Pérez.
El sector en Ecuador está aún en una situación de considerable retraso con respecto a otros países, en tanto que en el 2017 solo se contabilizaron 31 compañías de este tipo.
Las fintech están creciendo rápidamente en República Dominicana, pues tienen un millón de usuarios y mueven un promedio de 12 millones de transacciones mensuales.
Y en Puerto Rico esta expansión deriva en parte del hecho de que desde 2004 la cantidad de sucursales bancarias físicas ha disminuido de 546 a 304 para 2017.
EFE