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¿Cuál será la ciudad más peligrosa de Colombia dentro de 20 años? Esto respondió la IA

La IA evaluó diversos factores, como la situación económica, la presencia de organizaciones armadas, la corrupción y la desigualdad social, para determinar la ciudad más peligrosa de Colombia en 2044.

La ciudad de Cali registró 42 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2023. Foto: composición LR/AFP/Colprensa
La ciudad de Cali registró 42 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2023. Foto: composición LR/AFP/Colprensa

La inteligencia artificial de Google identificó la ciudad de Colombia que se ubicaría como la más peligrosa en términos de inseguridad para el año 2044, análisis que coincide con las alarmantes estadísticas de criminalidad que continúan incrementándose en el país. Descubre cuál es esa urbe.

Aunque Colombia es un destino turístico popular en América Latina, ha tenido dificultades para atraer a visitantes internacionales a causa de la preocupación por la seguridad. Un análisis realizado por Google señala que, si no se modifican las tendencias actuales y no hay una acción contundente por parte del Gobierno colombiano, tanto la percepción como la situación real de la seguridad en el país podrían deteriorarse en los próximos veinte años.

De acuerdo con el análisis del bot conversacional de Google, se prevé que para el año 2044, Cali se transforme en la región turística más peligrosa de Colombia. La investigación evaluó diversos factores, como la situación económica, el panorama político, la presencia de organizaciones armadas, los niveles de corrupción y la desigualdad social, para fundamentar esta conclusión.

¿Por qué Cali será la ciudad más peligrosa de Colombia en el 2044?

La proyección indica que, en los últimos años, Cali ha registrado la mayor tasa de homicidios en el país, lo cual respalda estas predicciones. Durante el año 2023, la ciudad registró una tasa de 42 homicidios por cada 100.000 habitantes, cifra que se incrementó debido a los desafíos asociados al narcotráfico, la actividad de pandillas y la operación de grupos armados ilegales.

El análisis también identifica a Bogotá y Cartagena como otras de las ciudades colombianas con desafíos en temas de seguridad. Mientras Bogotá se enfrenta a problemas como el robo, el hurto y el microtráfico, Cartagena lidia principalmente con asuntos vinculados al narcotráfico y hurtos, lo que las sitúa entre las áreas con los mayores riesgos en la nación.

Aumento de la criminalidad en Colombia

De acuerdo con las últimas estadísticas del Sistema de Información Estadístico, Delincuencial, Contravencional y Operativo (SIEDCO), con una media de 1.081 incidentes cada 24 horas, los robos a personas y las extorsiones son las dos principales categorías delictivas que más han aumentado en el primer semestre de 2023, en comparación con las estadísticas correspondientes al mismo intervalo de 2022. El incremento en el primer tipo de delito fue del 23%, con un registro de 189.358 casos, mientras que las extorsiones mostraron un crecimiento del 38%, totalizando 5.269 incidentes en los primeros seis meses del año.

En otras palabras, cada 60 minutos se registraron 44 hurtos a personas, para un promedio de 1.052 casos diarios, y cada 49 minutos ocurrió una extorsión en Colombia, para una media de 29 actos cada día.

Las estadísticas muestran que los robos a personas se concentran principalmente en tres intervalos horarios: de 10.00 a 10.59 a. m., con un aumento del 24% en los casos; de 11.00 a 11.59 a. m., con un incremento del 22%; y de 7.00 a 7.59 p.m., con un alza del 26%. Además, se observó que los viernes y sábados hay mayor incidencia de estos delitos, registrando un 44% más de situaciones en comparación con las demás jornadas de la semana.

La escalada en la tasa de criminalidad se atribuye a múltiples factores, destacando entre ellos la influencia de organizaciones criminales y la escasez de empleos de calidad, factores que han contribuido al aumento de personas involucradas en conductas ilícitas. De acuerdo con los reportes de entidades de seguridad, este fenómeno ha sido especialmente preocupante en zonas urbanas, donde la alta densidad de habitantes ofrece un ambiente propicio para las operaciones delictivas.