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“Borges me dijo: ‘Ese poema me lo dictó Kafka’”

Entrevista. La escritora y viuda de Borges participó de manera virtual en la Feria del Libro de Huancayo, entrevistada por la crítica literaria Francesca Denegri.

Jorge Luis Borges, a través de María Kodama, estuvo en la Felízh, en la reciente Feria del Libro de Huancayo. La secretaria y viuda del autor de Ficciones -cuyo bisabuelo, Manuel Isidoro Suárez, murió en la batalla de Junín- se hizo presente de manera virtual. La crítica literaria Francesca Denegri la entrevistó vía Zoom.

Ante la pregunta, ¿qué significó para Borges el Perú? María Kodama respondió: “Nosotros estuvimos en Perú, un lugar al que él tenía un enorme aprecio, justamente por la actuación de su abuelo en la batalla de Junín, que fue terrible, como toda batalla. Su abuelo, en realidad, para resolver toda esa situación de la guerra, se hizo matar. Entonces, él recordaba eso con mucha admiración”.

En otro diálogo, Denegri, ante la figura del héroe, del guerrero que tenía el escritor a propósito del bisabuelo, le consultó qué relación tenía Borges con la masculinidad épica.

“Borges -dijo Kodama- admiraba el valor, y, por lo tanto, admirada las batallas, también la valentía de los que dirigían todo eso; entonces para él la literatura que evoca las batallas era muy importante, le interesaba mucho”.

El tema de la ceguera no estuvo ausente. Kodama narró cómo era el trabajo de la escritura de Borges con la ayuda de ella.

“Él me dictaba las cosas. Era fascinante ver cómo él corregía y corregía. Un día me dijo el editor :’Ay, María, no sé qué hacer. Para evitar que siga con los cambios, le decía a Borges: ‘Lo lamento, maestro, están ya para imprimir, no puedo cambiar nada’; ‘Ah, bueno, cuando salga la próxima edición, usted me avisa’, me respondía. Cuando salía la edición, empezaba nuevamente a hacer cambios. Hay una cosa muy interesante: hay un poema que le escribió a Kafka, pero ese poema no lo corrigió nunca, entonces un día yo le digo: ‘¿Borges, por qué no corriges este poema?’. ‘Ah, no –me dijo–, yo no puedo corregir este poema porque me la dictó Kafka en un sueño. Cuando Kafka lo corrija, en otro sueño, entonces yo lo corrijo, pero mientras no sea así, ese poema no es mío. Es de Kafka’”.

María Kodama también escribe, pero le dijo a Denegri que no tiene la obsesión de corregir que tenía el autor de El Aleph.

“No. Solo escribo cuando ya tengo la idea en la cabeza. El libro que publiqué, Relatos, salió por una cuestión muy personal. Yo no quería publicar porque Borges quería hacer el prólogo y yo no tenía interés. Todo el mundo quería porque Borges iba a escribir el prólogo, pero yo no quería eso”, narró Kodama.

Se le anunció que en la feria de libro de Lima se va a presentar el libro Querencias. Guerra, traducción y filosofía en Jorge Luis Borges, de Efraín Kristal, residente en Estados Unidos.

“Hay algo muy lindo que hicieron en Estados Unidos la gente de Borges -cuenta Kodama-. Ellos hacen una comida con escritores y críticos de literatura para homenajear a Borges, y, por supuesto, estuve invitada; entonces, cuando termina la comida fue muy emocionante, porque se ponen todos de pie y dicen: ‘Vamos a hacer un brindis por vos’. Entonces, yo digo, pero por qué y me responden: ‘Porque hay muchos autores tan importantes como Borges, pero tu trabajo hace que todos sintamos que Borges está vivo’. Para mí fue muy emocionante”.

¿Cuál es el legado más importante que te ha dejado Borges? Pregunta Francesca Denegri. “Su obra, que es una cosa bastante complicada, pero es fascinante. Así es que me dejó su alma, que era su obra”, respondió.

Y, por supuesto, el tema de la política también estaba en el diálogo, si es que Borges hablaba en serio o en broma en política.

“Hablaba en serio. Bueno, en todo hablaba en serio. Yo creo que la política, en general, en los países latinoamericanos, no existe. Todo es un enfrentamiento como blanco o negro. Un partido contra otro; por ejemplo, en mi país, unitarios y federales; peronistas y antiperonistas; kirchneristas y antikirchneristas. Eso no es política. La política es “yo soy de izquierda, yo soy de derecha, ganas vos’, entonces yo te digo que me parece genial esto que has hecho, yo voy a continuarlo, esto es lo que yo voy hacer, ¿qué te parece? La política es una conversación entre todos los partidos para gobernar y hacer que el país salga adelante, si no, no es una democracia”, enfatizó Kodama.

También respondió adónde nos está llevando la tecnología, sobre todo a los niños.

“Pienso que esta tecnología de alguna manera tendría que encontrar la forma para una enseñanza y no simplemente para una distracción o para conocer chismes. Pienso que eso podía ser interesante, puesto que cada época se vale de elementos diferentes y, lógicamente, en nuestra época los nuevos elementos son las computadoras, los televisores, en fin; entonces habría que tratar que la enseñanza pudiera seguir a través de eso”, concluyó Kodama.