Cultural

Vallejo, su muerte y el Día del Poeta Peruano

Por: Santiago Risso, poeta y comunicador social.

César Vallejo
César Vallejo

Por: Santiago Risso, poeta y comunicador social.

Hoy 15 de abril se conmemora el día en que el año 1938 partió a la eternidad nuestro más grande poeta, César Vallejo, quien murió un Viernes Santo en la ciudad de río Sena, París. Vallejo representa la humanidad en su titánica obra; con Trilce, que inaugura la vanguardia en 1922. Quien no ha declamado el poema que da título a su primera obra modernista Los heraldos negros (1918); nos hemos consustanciado con “Masa” (España aparta de mí este cáliz, 1939), donde los milicianos de Iberia somos todos, no algunos, sino todos los seres humanos de la tierra, para que el cadáver se levante y ocurra el milagro de la poesía, de la vida, “echóse a andar”. A ello, a la muerte del vate de Santiago, el ensayista y poeta alemán Hans Magnus Erzensberger afirmó: “Las enfermedades que sufrió Vallejo eran desconocidas en la medicina. Una se llamó España, y la otra, una enfermedad muy vieja y venerable: el Hambre”.

Otro 15 de abril; esta vez a mediados de los ochenta, se estableció mediante la Ley Nº 24616, promulgada el 29 de diciembre de 1985, el 15/4, como el Día del Poeta Peruano, en homenaje al “peruano universal” César Vallejo, ley que también crea la Casa del Poeta Peruano, como institución de apoyo y difusión de la obra creativa de los poetas peruanos.

Nuestro Perú, con el ejemplo del más grande, es tierra de poetas, y en este día, celebremos la poesía, leyendo a voces como Chocano, Eguren, Carlos Oquendo de Amat, Carlos Concha Boy, Serafín del Mar, Martín Adán, Gamaliel Churata, Magda Portal, Emilio Adolfo Westphalen, César Moro, Ricardo y Enrique Peña Barrenechea, Javier Sologuren, Jorge Eduardo Eielson, Washington Delgado, Juan Gonzalo Rose, Blanca Varela, Yolanda Westphalen, Nicanor de la Fuente, Vicente Azar, Carlos Germán Belli, Leoncio Bueno, Javier Heraud, César Calvo, Antonio Cisneros, Arturo Corcuera, Alejandro Romualdo, Pablo Guevara, Luis Hernández, Elvira Ordóñez, Marco Martos, Juan Cristóbal, José Watanabe, Enrique Verástegui, Jorge Pimentel, Guillermo Chirinos Cúneo, Winston Orrillo, Carlos Zúñiga Segura, Gustavo Armijos, Martín Fierro Zapata, Antonio Cillóniz, Jorge Nájar, Luzgardo Medina, Eduardo Chirinos, Dante Lecca, Rosella Di Paolo, Carolina Fernández, Rodolfo Ybarra, Atala Matellini, Rosamarina García, José María Gahona, Elí Martín, y la lista interminable, sigue cincelando versos para la memoria colectiva de la belleza y la palabra.

Infaltable un poema de Vallejo, que nos acompañe en este aislamiento, como un tallo de cielo que crece hacia la vida inmortal, las dos últimas estrofas, tercera y cuarta de “Piedra negra sobre una piedra blanca”: “César Vallejo ha muerto, le pegaban / todos sin que él les haga nada; / le daban duro con un palo y duro // también con una soga; son testigos / los días jueves y los huesos húmeros, / la soledad, la lluvia, los caminos…”.