La mujer que olió el párkinson de su esposo y hoy es clave para detectar la enfermedad
Con su superolfato, Joy Milne está ayudando a que los científicos desarrollen una prueba de diagnóstico precisa para esta enfermedad.
El párkinson, una enfermedad neurodegenerativa que afecta a más de 8 millones de personas, según la OMS, es muy complicado de diagnosticar debido a que no hay una única prueba que la pueda detectar con precisión. Hasta ahora, todo lo que existe son exámenes físicos, evaluaciones psicológicas y escáneres cerebrales.
Sin embargo, esto podría cambiar con el superolfato de Joy Milne, una mujer escocesa de 72 años, quien, tras la experiencia de tener un esposo con párkinson, puede distinguir a la perfección el olor característico de esta condición.
El superolfato de Joy Milne, denominado científicamente como hiperosmia, le permite distinguir cómo huele un enfermo de párkinson y una persona sana. Foto: Chris Watt
El superolfato de Joy Milne
Milne, quien por herencia tiene hiperosmia —un trastorno que eleva la sensibilidad olfativa—, había detectado que su esposo, Les, había cambiado de aroma años después de casarse.
“Tenía un olor a humedad bastante desagradable, especialmente alrededor de los hombros y la parte posterior del cuello, y su piel definitivamente había cambiado”, contó la mujer escocesa y exenfermera ante la BBC.
Al principio, le decía a su esposo que el hedor posiblemente se debía a su mal aseo, pero, en los años posteriores, continuaba sin desaparecer, mientras que sus cambios de humor eran cada vez más frecuentes.
Joy Milne al lado de su esposo Les, quien fue diagnosticado de Párkinson y murió en 2015. Foto: Joy Milne / PA Media / The Guardian
A Les le diagnosticaron párkinson 12 años después de que Milne detectara su peculiar aroma. Entonces, sus síntomas comenzaron a ser más evidentes: dificultad para hablar y caminar, deterioro cognitivo y temblores.
Pero Milne solo se dio cuenta del vínculo entre el olor ‘desagradable’ y el párkinson cuando acompañó a Les a un grupo de apoyo para los pacientes con esta enfermedad y descubrió que todos tenían un aroma similar.
El sueño de una prueba para detectar párkinson
Pese a que Les falleció en 2015, Milne le prometió a su esposo que investigaría más acerca de su superolfato. Y eso hace hasta hoy: apoyar a los científicos que buscan desarrollar un test que sea un fiel retrato de su olfato.
En septiembre de 2022, por ejemplo, científicos de la Universidad de Manchester anunciaron que habían desarrollado un test simple usando las habilidades de Milne luego de tres años de trabajar a su lado.
Milne ha colaborado con la Universidad de Manchester en los últimos tres años. Ahora, los científicos de dicho recinto han elaborado un test que busca ser un fiel retrato de su superolfato. Foto: captura de pantalla BBC
El método consiste en recoger con un hisopo muestras de sebo, una sustancia aceitosa que nuestra piel emana de forma natural, pero que se produce de manera alterada durante el párkinson. Después, se analiza la composición química de dichas muestras mediante una técnica llamada espectrometría de masa.
El examen, que demora apenas tres minutos, se puso a prueba en un experimento con 150 voluntarios hombres y mujeres: 79 de ellos tenían la enfermedad de Párkinson (grupo experimental) y los otros 71 individuos no (grupo de control). Tras el ensayo, los científicos descubrieron que de 4.000 compuestos únicos en el sebo, 500 de ellos diferían entre los pacientes enfermos y aquellos que no.
Aunque dicho test todavía continúa en prueba, el equipo de científicos ve con gran optimismo los resultados de sus primeros ensayos, que se describe en un artículo en el Journal of the American Chemical Society.
“Lo que podríamos esperar es que, si podemos diagnosticar a las personas antes, antes de que aparezcan los síntomas motores, habrá tratamientos que puedan prevenir la propagación de la enfermedad. Esa es realmente la ambición final”, dijo la química Perdita Barran, quien dirigió la investigación ante la BBC Escocia.
Por su apoyo a la ciencia, Milne ha sido nombrada profesora honoraria en la Universidad de Manchester y también figura como autora de los artículos científicos en los cuales colabora.